Llega uno de los partidazos del año, el derbi vasco, el de toda la vida, el Athletic y la Real frente a frente. Ambientes fabulosos, algo menos esta vez por el desorbitado precio de las entradas, aficionados dándolo todo y, sobre todo, fútbol vasco. El conjunto bilbaíno llega con muchas ganas ya que lleva cuatro años sin ganar un derbi, además, están en un buen momento de forma después de encadenar varias victorias seguidas, sobreponiéndose a su mal arranque liguero.

Las mismas caras

El equipo dirigido por Ernesto “el Txingurri” Valverde no se caracteriza precisamente por cambiar muchos jugadores cada temporada debido a su fiel decisión de contar solo con gente vasca. Aun así, este verano ha sido más parado de lo normal. Ninguna incorporación para el equipo, exceptuando a varios chavales del Bilbao Athletic como son Yeray Álvarez o Mikel Vesga, y muy pocas salidas, que se han producido a última hora, como son las de Kike Sola y Borja Viguera, además de las múltiples cesiones, la mayoría de ellas repetidas.

En la práctica, Valverde ha conseguido una plantilla base y mueve muy pocas fichas. Eso se refleja en las alineaciones ligueras también. El técnico tan solo rota en Europa League o Copa, tiene su once bastante definido. Juega con un 4-2-3-1 habitualmente en el que Beñat es el eje del equipo. La defensa suele estar formada por Balenziaga, Laporte, Boveda, y De Marcos, aunque Lekue en la derecha y Yeray en el centro de la zaga suelen tener alguna oportunidad también. En el centro del campo, Beñat y San José tienen monopolizado el doble pivote con Raúl García en la media punta. La banda derecha es para Iñaki Williams y el delantero centro fijo es el pichichi Aritz Aduriz, pero en la izquierda es donde suele haber más variaciones, Muniaín, Susaeta o Sabin Merino se turnan en una posición poco definida. La portería es donde el entrenador está teniendo más dudas; Kepa viene en una progresión escandalosa y parece que le tiene ganada la posición a Iraizoz pero hasta ahora ambos han jugado, relegando Herrerín a un segundo o tercer plano.

Mas actitud e intensidad que juego vistoso

La tradición dice que el Athletic gana los partidos por casta, y razón no le falta. A pesar de no emplear un juego de toque vistoso, su intensidad y actitud incansable les ha dado muchos puntos. Una defensa férrea y un ataque efectivo son sus armas, con un Aduriz que mejora con el paso del tiempo.

Aymeric Laporte remata ante toda la defensa malaguista en un encuentro en San Mamés. Foto: VAVEL
Aymeric Laporte remata ante toda la defensa malaguista en un encuentro en San Mamés. Foto: VAVEL

El juego aéreo es muy importante en este equipo. De ello se aprovechan en las jugadas de estrategia. Beñat es un lanzador exquisito y los Laporte, Aduriz, Raul García o San José hacen estragos en las defensas rivales con su poderío físico.

Una de las características del equipo bilbaíno, y que es muy utilizada, es el uso de balones largos para crear disputas de balón aéreas, en las que son muy potentes, para poder buscar segundas jugadas aprovechándose de caídas y peinadas

Salida de balón débil

Tanto Laporte como San José o Boveda entre otros no son demasiado hábiles por lo que la salida de balón de los leones se ve resentida en gran parte.

Otra debilidad del conjunto dirigido por Valverde es el exceso de tarjetas debido a la acumulación de faltas. Ese juego intenso les deja muchas veces al límite del reglamento. Buscar segundas amarillas a los jugadores locales puede resultar clave para la victoria.

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Sobre el autor
Unai Valverde
Periodismo en la UPV, Scout en Perform, redactor de la sección de la Real Sociedad y coordinador de Inglaterra en VAVEL