Duelo de filiales en el Di Stéfano. Los mirlos blancos recibían a las crías de león, que retornaban al coliseo castillista tras pasar una temporada en la categoría de plata. Los blancos llegaban al partido necesitados de la victoria, sabedores de lo mal que se le está dando sumar en las salidas.
Comenzó el encuentro con el Bilbao Athletic presionando muy arriba, obligando al Castilla a jugar en largo, ineficaz ante la escasez de jugadores rápidos en el filial merengue. Por contra, el pequeño león bilbaíno recuperaba el cuero con facilidad en el centro del campo, lanzando veloces contragolpes, muy exigentes para la zaga castillista. Villalibre iba a aprovechar uno de estos contragolpes para poner en jaque al cancerbero blanco; le asistió Jurgi Otxeo y cabeceó el ariete, obligando a Abad a realizar una gran estirada.
Simón se disfraza de Ter Stegen
Con el paso de los minutos el Castilla fue poco a poco haciéndose dueño del esférico, un espejismo para las estadísticas, ya que la posesión era estéril, sin llegada a la meta rival. Rozaba la primera media hora de encuentro y el Bilbao Athletic inquietaba la defensa merengue con continuos robos en el centro del campo, para desesperación de Febas, que disputó un primer tiempo muy flojo. Sin embargo, en el peor momento de juego castillista iba a llegar el primer tanto del encuentro. El meta Simón intentaba controlar un balón intrascendente en la frontal del área, pero perdía el desequilibro al pisar el cuero, dejando el paso franco para Sergio Díaz, quien anotaba el primer gol para el Castilla, que hasta ese momento no había disparado entre los tres palos.
El conjunto de Solari se creció con el gol e hizo amago de ir a por el partido. Odegaard, que cuajó una gran actuación, disparó escorado tras una jugada entre líneas. Se fue perfilando hacia el exterior de su pierna izquierda y chutó, enviando el cuero demasiado cruzado. Instantes después iba a a ser el Bilbao Athletic, que no se arrugaba a pesar del barapalo del tanto merengue, quien dispusiera de una nueva ocasión. Robó Olaetxea en el centro del campo, condujo y asistió a Córdoba, quien disparó al centro, fácil para Abad.
En la segunda parte el Bilbao Athletic llevó el peso del partido ante un Castilla que salió a conservar el resultado. El filial merengue tenía el cuero pero no las ocasiones. El equipo de Ziganda, consciente de ello, se fue haciendo con el gobierno del partido y conforme pasaban los minutos comenzó a tener mayor presencia en el área blanca. Bengoa, con un zapatazo desde la frontal tras un rechace, estrelló el cuero en el larguero e hizo que se estremeciera la estructura de la portería para alivio de la afición merengue.
El Castilla dispuso tan sólo de una ocasión en toda la segunda mitad. Odegaard cogió el cuero en el centro del campo, condujo superando la maraña del centro del campo bilbaíno y asistió a Sergio Díaz, que llegó desde la izquierda. El paraguayo se perfiló y disparó, enviando el cuero a escasos milímetros del palo corto de Simón.Hermoso deja al Castilla con uno menos a cinco minutos del finalEl Bilbao Athletic llegó a disponer de la oportunidad de igualar la contienda, ya que a cinco minutos del final se quedaba en superioridad numérica ante la expulsión del central Mario Hermoso por doble amonestación. Llovieron las ocasiones desde ambas bandas, pero el conjunto de Solari aguantó el chaparrón de los minutos finales. Tres puntos más suma el Castilla, esta vez ante un rival directo, que le acercan a los puestos de promoción.