El periodo de austeridad parece haber acabado para Aleix Vidal. Tras sus múltiples ausencias en convocatorias durante un periodo de dos meses, el lateral de Santpedor parece haber recuperado las sensaciones, además de haber convencido a Luis Enrique cuando todo parecía ya roto. Pese a que el ex del Sevilla ha estado bastante tiempo inactivo, sus últimas intervenciones llaman al optimismo en las oficinas del Camp Nou. Y contra el Borussia Monchengladbach, en Champions, fue otro día de esos. Combinando con Leo Messi y Dénis Suárez, Aleix se sintió muy cómodo en el terreno de juego. Es cierto que los alemanes no crearon peligro arriba, pero más allá de eso su aparición fue notable para el cuerpo técnico.

Una vez acabado el encuentro, Aleix pasó ante los micrófonos para valorar su actuación y el pase del equipo a la siguiente ronda de la Champions: "Valoro muy positivamente el haber podido jugar. Después de estar tres meses sin jugar, es muy difícil adaptarse y tener un rendimiento como el de hoy". Una de las claves de su retorno ha sido la cabeza, que según él la ha tenido que trabajar mucho: "Tenía que trabajar el tema mental porque por desgracia la situación que estoy viviendo no la esperaba cuando llegué". 

Pese a que su situación es complicada, Aleix se muestra convencido de que las ocasiones llegarán: "No pensaba estar tanto tiempo sin jugar, y haber tenido una actuación como la que he tenido hoy no hubiera sido posible si no trabajara en los entrenamientos. Con el mister no tengo problemas. Soy una persona que no busca problemas y nunca lo haré. Lo que hago es trabajar para cuando me den una oportunidad como hoy poder aprovecharla".

Finalmente, el zaguero reconoció que nunca pensó en abandonar el club, ya que su sueño siempre será triunfar en el Barça: "Espero con ilusión que pueda revertirse mi situación. Disfruto de cada día que estoy aquí. Yo nunca he dicho que quiera irme y trabajaré siempre al 1000 por 1000 para poder triunfar aquí".