Los rojiblancos dan por finalizada la primera prueba europea de la temporada 2016-2017 con luces y sombras, pero con el objetivo cumplido. Tras un decepcionante debut en Italia ante el Sassuolo (3-0), los chicos de Ernesto Valverde pusieron el cerrojo en San Mamés para contar los partidos en casa por victorias.
El empate en Austria ante el Rapid de Viena (1-1) es el único punto que ha logrado el combinado vasco fuera de casa, lo que le ha servido para cerrar su grupo con diez puntos. A falta de lo que ocurra este viernes entre Sassuolo y Genk, la escuadra vizcaína sueña aún con pasar a dieciseisavos como primeros de grupo.
La noche del jueves estuvo llena de noticias positivas para el Athletic Club. Por un lado, Enric Saborit logró anotar su primer gol con la elástica rojiblanca. El defensa debutó la pasada temporada, pero ha sido este año cuando le ha llegado la oportunidad a modo de minutos y confianza por parte del míster para demostrar su categoría. Con 24 años todavía, tiene por delante una brillante carrera que disfrutar.
El 8 de diciembre de 2016 será siempre recordado por Asier Villalibre como el día en que empezó a darse a conocer en el viejo continente. Unos días después de debutar en liga con el primer equipo y de dar una asistencia, El Búfalo de Gernika disfrutó de sus primeros minutos en Europa League, y a buen seguro no serán los últimos para el joven goleador vizcaíno de tan solo 19 años.
Por último, cabe destacar la trayectoria de un Iker Muniain que el próximo 19 de diciembre cumplirá 24 años. Ante el Rapid, el jugador navarro cumplió 300 partidos con la camiseta del Athletic en los que ha logrado anotar un total de 37 goles. Debutó el 30 de julio de 2009 en un partido de Europa League ante el Young Boys suizo convirtiéndose en el futbolista del Athletic más joven en debutar con apenas 16 años. Todavía le quedan muchos encuentros a un Iker que quiere seguir haciendo historia con el equipo de su vida.
