Allá en la temporada 2014-2015 la UD Almería anunciaba la creación de una comisión deportiva que se encargaría de llevar a cabo diversas tareas relacionadas tanto con la plantilla como con la dirección del club: confeccionar las plantillas del primer y segundo equipo, planificar los partidos de pretemporada (siempre bajo las indicaciones de los técnicos y la supervisión económica de la presidencia) suponiendo el principal enlace entre los equipos y el club, haciendo un seguimiento de los jugadores almeriensistas.

Tras la salida de Alberto Benito del club rojiblanco, fue Andrés Fernández el encargado de asumir su rol en el club indálico. Junto con Ángel Luis Catalina ha sido el encargado de la gestión de la plantilla en esta presente temporada. Pero esta tarea que se le asignó parece que ha finalizado, y no de la mejor manera posible: Fernández ha sido destituido de su puesto tras la dura derrota sufrida por el equipo unionista como local a manos del UCAM Murcia de Francisco, un ex de la casa rojiblanca.

Múltiples han sido las declaraciones hechas a la prensa a lo largo de su trayectoria en la cabeza visible de la dirección deportiva, siempre cautelosas, sin dar nunca demasiadas pistas sobre los posibles movimientos del club en los mercados en los que ha pescado a fin de evitar intromisiones por parte de otros clubes que pudieran arruinar las operaciones que con tanto celo se intentaban llevar a buen puerto.

Ahora su puesto queda vacante. Quedan por realizarse varios movimientos en el seno del club rojiblanco. Ángel Luis Catalina podría quedar solo al mando de la dirección deportiva o, por el contrario, que el recién destituido Fernando Soriano lo acompañe en la gestión del club de aquí en adelante. Quedan muchas incógnitas por resolver, entre ellas, el futuro de un equipo hundido en la clasificación y que trata, por todos los medios, de remontar su crítica situación.