Campeón del mundo y Balón de Oro en 2006, Fabio Cannavaro vivió su carrera siempre (o casi siempre) desde la élite del fútbol europeo y mundial. Pocos jugadores pueden presumir de haber jugado en tres de los mejores equipos del mundo como son la Juventus, el Inter de Milán y el Real Madrid, además de haber sido internacional más de cien veces, capitán de su selección, campeón del mundo y mejor jugador del planeta.

El mariscal napilotano jugó sus primeros partidos en la zaga del equipo de su ciudad. Allí, en Nápoles, el joven Fabio debutó con solamente 19 años. La temporada siguiente a la de su debut, Cannavaro ya era titular y tres años después de su primer partido ya había convencido a la opinión pública italiana de que era el central del futuro.

Tras su paso por históricos de Italia como el Parma, el Inter y la Juventus, Cannavaro fichó por el Real Madrid después de proclamarse campeón del mundo con su selección en el Mundial de 2006 en Alemania. A finales de ese mismo año, fue nombrado Balón de Oro, premio que le acreditaba como el mejor jugador del mundo.

Ahora, Cannavaro es entrenador del Tianjin Quanjian, con el que logró el ascenso a la primera división china y donde están puestas todas las ilusiones como proyecto a medio plazo, aunque sabe que su futuro como entrenador está en Europa. Quizás en un futuro sea en el Real Madrid o en el Napoli. El capitán italiano recuerda sus orígenes en Nápoles: "fui recogepelotas en aquel partido de 1987 (...) Butragueño ha sido el único jugador de fútbol que me ha hecho llorar".

​Napoli y Real Madrid buscan un hueco en los cuartos de final de la Champions League. Entre todos los aficionados del mundo que disfrutarán de este duelo estará Fabio Cannavaro, cuyo pasado está ligado con ambos equipos y quien, pase lo que pase, estará contento  de ver a uno de sus ex clubes avanzar en la máxima competición europea.