Quique Setién ha cerrado su etapa en la UD Las Palmas de forma inmediata después de varios meses de guerra con el club en los que se han aireado cuestiones de las negociaciones entre ambas partes. La realidad es que la figura del entrenador ha ido quedando desgastada con el paso de los días hasta el punto de tener que dar respuesta a muchas preguntas que estaban sin responder durante varias ruedas de prensa en las que se le veía sensiblemente afectado por la situación personal que estaba viviendo. No obstante, la gota que ha colmado la paciencia del entrenador cántabro ocurrió en después del encuentro contra el Villarreal, momento en el que hubo una serie de enfrentamientos verbales en el vestuario que le han hecho tomar una decisión definitiva aunque restan todavía dos meses para el final de la competición liguera.

Por ello, Setién convocó a los medios de comunicación en la sala de prensa del Estadio de Gran Canaria para leer un comunicado en el que no admitió preguntas. Éstas fueron sus palabras: 

“Buenos días a todos. Esta mañana he comunicado al presidente, la plantilla y el cuerpo técnico que no voy a seguir en negociaciones con el club y no voy a continuar en Las Palmas. Uno no sabe cómo puede afectar esto a la plantilla aún sin tener el objetivo conseguido. Antes del partido del Espanyol, tuve una conversación con el presidente en la que me pedía celeridad en la decisión, algo que también he notado en el entorno de la afición, cuestión por la que me he apresurado a decir esto. Pensaba hacerlo a principios de esta semana, pero necesitaba tiempo para escribir esto y ayer teníamos un partido muy importante. Creo que seguir en esto va a perjudicar a la plantilla. En diciembre pensaba que me iba a quedar, en ese momento las diferencias eran mínimas, pero con el tiempo se han convertido en insalvables. Sólo tengo palabras de agradecimiento para Miguel Ángel Ramírez, Luis Helguera, Toni Cruz y Patricio Viñayo por darme esta oportunidad. Jamás olvidaré que me recogieron en el paro hace 18 meses. "Después de terminar aquí, celebraré las victorias y lloraré las derrotas de la UD" Seguiremos trabajando como hemos hecho hasta ahora para dejar al equipo lo más arriba posible. Le he pedido a los jugadores la máxima profesionalidad posible para conseguir todo lo que nos propongamos. Soy consciente lo que puede suponer esto para aquellos aficionados que me han pedido que me quede. La vida te pone encrucijadas en las que el corazón te pide una cosa y la cabeza otra. He intentado trabajar lo mejor posible desde que llegué, con honradez y con ganas. Le quiero dar tiempo al club para la renovación de jugadores, la contratación de un nuevo entrenador y pueda definir lo que buscará en el próximo mercado. La ilusión se renovará con la llegada de un nuevo entrenador, como ha ocurrido otras tantas veces en la historia de Las Palmas. Sólo tengo palabras de agradecimiento para Las Palmas y, por eso, después de terminar aquí celebraré las victorias y lloraré las derrotas de la UD”.

De esa manera, el técnico santanderino puso un punto y final a su historia con la UD Las Palmas.