Denis Cheryshev continúa con su particular lucha contra los problemas físicos. El ruso no consigue salir de esa espiral de lesiones que no le está permitiendo desempeñar el papel de jugador clave que se espera de él en Vila-Real. Operaciones, recuperaciones fallidas y muchas, muchas recaídas; ese podría ser el resumen del último año del zurdo.

Con su llegada al Submarino Amarillo, parecía que Cheryshev iba a dejar atrás todos los fantasmas que le perseguían desde aquella sonada alineación indebida del Real Madrid contra el Cádiz. Un despiste organizacional iba a dar al traste con su sueño de triunfar en el club blanco, colocándole en el centro de todas las críticas. Previo paso por el Valencia, el jugador regresaba a un Villarreal que le esperaba con los brazos abiertos, con una afición dispuesta a hacer las veces de terapeuta y devolverle la sonrisa y los minutos perdidos.

Sin embargo, Denis llegaba al club amarillo tras haber terminado la temporada anterior de forma muy prematura, concretamente el 7 de marzo de 2016. Aquel día, en un partido frente al Atlético de Madrid, iba a empezar el calvario de Cheryhsev. Una lesión muscular de grado II en el recto anterior le iba a obligar a estar muchas semanas de baja para, además, terminar pasando por el quirófano, por lo que decía adiós a lo que restaba de campaña. Pero los groguets confiaron en su recuperación. En septiembre, su reaparición se hizo efectiva, disputando algunos minutos en La Rosaleda, pero la alegría no duraría mucho, y es que el bíceps femoral de su pierna derecha quiso unirse al carrusel de contratiempos. Esto supondría otras dos semanas más alejado del césped, y la meta de volver a un estado de forma óptimo se alejaba.

El 30 de septiembre, en Ipurúa, el ruso volvía a competir y, aunque las huellas de la inactividad se hacían evidentes, los aficionados del Villarreal empezaban a ver posible el regreso del Cheryshev que triunfó a las órdenes de Marcelino García Toral. Pero solo un mes después, tras un partido de Copa del Rey, volvieron los problemas; el recto anterior no terminaba de curarse y, esta vez, la ausencia volvería a ser larga, rondando los dos meses de duración. De nuevo, Denis lucharía por dejar atrás las molestias para ver cómo, de una manera tremendamente cruel, todo su esfuerzo quedaría en nada: poco después de empezar a entrar en la dinámica del equipo, recaída por culpa del dichoso recto anterior.

Además, esta parece la definitiva, y es que el parte médico oficial habla de cinco a ocho semanas de baja. Es decir, prácticamente la totalidad de los partidos que restan en esta temporada. Denis Cheryshev está recorriendo un camino de espinas que parece interminable, pero la estabilidad que le va a permitir su contrato con el Villarreal, junto con las ganas del propio jugador, van a hacer que le veamos muy pronto maravillando al Estadio de la Cerámica, de eso no hay duda. 

Denis Cheryshev, el día de su presentación. Imagen: María José Segovia (VAVEL)

VAVEL Logo
Sobre el autor
Diego Delgado
Periodismo en la UCM. Apasionado del fútbol y la música.