Zabaleta y Ubis brillan en Gobela

Todo estaba preparado para una nueva tarde de fútbol en Gobela. Otra más en los más de cien años de historia del Arenas, uno de los equipos que fundó la liga española, allá por el año 1928. Mientras Europa entera estaba sumida en un período de inestabilidad, en Bizkaia los pueblos y ciudades bullían con el balompié. El Athletic era el club dominante, pero el Arenas en aquel momento era un club muy relevante que incluso pudo ganar un título, la Copa del Rey. Casi nada queda ya de aquel histórico equipo. Jugadores, directivos, técnicos han quedado en la retina, pero lo que siempre permanece es la afición, que nuevamente ha vuelto a acudir al coqueto recinto de Gobela. Porque si algo tiene la afición de Getxo es su fidelidad a los colores. Y hoy nuevamente lo han vuelto a demostrar.

El Arenas encaraba su partido con la misión de conseguir la victoria para alejarse de los fantasmas del descenso, más sabiendo que su calendario será complicado. Los de Bolo contaban con 41 puntos y no podían relajarse, porque la jornada en la zona de abajo había sido explosiva. Sestao y Sanse consiguieron la victoria y el Amorebieta ya conseguía vencer en Gazituaga. Por su parte, el Mensajero, que había caído a puestos de descenso tras la victoria del Sanse, buscaba ganar y salir del descenso, para afrontar con más garantías su próxima final en La Palma, frente al Mensajero. Ambos ansiaban la victoria y el empate no era lo deseado por ninguno.

Antes del comienzo del encuentro, se realizó un homenaje en honor a los juveniles del Arenas de Getxo, que lograron esta jornada certificar su ascenso a la máxima categoría del fútbol juvenil. Jon Pérez Bolo saltó al campo con la siguiente formación: Txemi, Aguiar, Royo, Cabero, Bergara, Zumalakarregi, Ubis, Uranga, Dani López, Zabaleta, Luisma Villa. Por su parte, el míster visitante apostaba por el siguiente once: Jone, Gabri Ramos, Junda, Víctor Marco, Kamal, Jaime, Álex Cruz, Omar, Borja Rubiato, Matías, Ale González.

Mejor los locales

El partido comenzó con imprecisiones por parte de los dos, aunque los locales comenzaron más intentos. Dani López se mostró muy activo al inicio, así como el mejor jugador arenero, Luisma Villa, que dejó muestras de su calidad en varias acciones. El Mensajero trataba de acudir el dominio getxotarra, aunque lo cierto es que el cuero rondaba siempre por los dominios de Joné. El primer susto para los vascos llegó cuando Txemi estrelló su despeje en un ariete rival. Pero los canarios no salían de su área, y poco a poco la presión sobre su marco se iba incrementando. Dani López y Ubis comenzaron a aparecer asiduamente y dieron cierto dinamismo al ataque. Con el partido inclinado en favor del Arenas, parecía cuestión de tiempo que llegasen las ocasiones.

Contra pronóstico, en los siguientes minutos, el partido se trabó. Las las pérdidas se contaron por decenas y el partido se volvió a nivelar. Tras unos minutos de dudas, los pupilos de Oramas se animaron, buscando con algo más de intención la meta contraria. Pero fue sin embargo el Arenas quien iba a tener las más claras. Rápidos al contragolpe, el equipo de Bolo pudo poner a prueba en varias ocasiones a Jone. Al filo de la media hora, los vascos gozaron de un saque de banda. Poniendo rápidamente el esférico en juego y a través de una secuencia de pases, el cuero llegó a Zabaleta. El interior hizo una magnífica jugada por banda, yéndose de su marca, colándose en el área y sirviendo el tanto en bandeja a Ubis, que con un colocado testarazo, embocó al fondo de las mallas.

Zabaleta lo guisa y Ubis se lo come

Dos minutos más tarde, Ubis tuvo una gran ocasión, aunque su vaselina se estrelló en el palo y en segunda instancia, el remate se marchó fuera. El Mensajero iba a volver a reaccionar e incluso gozó de un penalti a favor. Ale González era el encargado de intentar transformarlo, pero no lo consiguió. Txemi adivinó su intención y consiguió desviar el balón al cielo de Gobela. Los palmeros no se iban a rendir tan fácil y probaron una vez más a Txemi, que se mantuvo sobrio y seguro bajo palos durante todo el primer tiempo. Y así se iba a llegar al intervalo del encuentro, con un equipo local incisivo y con una escuadra visitante algo timorata al inicio, pero valiente al final.

El segundo tiempo arrancó con un Arenas muy metido en el partido, Zabaleta iba a ser el auténtico protagonista en los primeros minutos. Primero probó un disparo y seguidamente recibió la amarilla. Los de Bolo iban a sufrir un revés en forma de lesión de Luisma Villa, que tuvo que salir del verde sustituido por Nacho Pérez. Los atacantes locales lo seguían intentando, pero poco a poco el partido se fue inclinando de lado visitante. Los insulares, a base de continuas faltas, consiguieron parar el juego arenero y trataron de manejar el encuentro. Aunque los de Oramas llegaban fácil a los tres cuartos, no supieron crear peligro alguno, puesto que los centros eran imprecisos y no llegaban a su destino. EL míster canario decidió tomar riesgos, metiendo un atacante más como Nacho Rodríguez.

Grandes intenciones, pero sin acierto

La dinámica seguía siendo la misma. El Mensajero, a base de trabajo e intensidad controló las embestidas locales y a través de empuje se lanzó hacia la meta rival, pero sin llegar a disparar a puerta. El Arenas pudo sentenciar el choque, Ubis remató a quemarropa desde el área chica, pero un zaguero canario despejó bajo palos. Después, Dani López con toda la portería a su merced, remató fuera, desaprovechando una pintiparada ocasión para subir el segundo. Pero el partido había cambiado ya totalmente. Los isleños se mantuvieron muchos minutos en campo rival, intentándolo, acertándose, pero nuevamente sin remates certeros.

El partido pasó en los últimos minutos a ser algo anodino. Las ocasiones brillaban por su ausencia, no había ningún peligro y el partido se llenó de errores, jugadas mal finalizadas y envíos imprecisos. Hasta que Zabaleta, uno de los mejores en la tarde de hoy, tuvo nuevamente la oportunidad de asegurar los tres puntos. Pero tampoco logró acertar con la meta rival y el resultado aún se mantuvo en el aire hasta el final. Dani López disparó, pero el balón fue más cerca de la ría de Bilbao que del portal local. El encuentro encaraba ya su final. Los canarios se vieron ya sin energías y no pudieron apretar todo lo que seguro hubiesen querido. El encuentro llegó así a su final tras seis largos minutos de añadido.

El Arenas de Getxo, con este triunfo, suma 44 y queda en zona de nadie. Se enfrentará la próxima jornada al Castilla en el Di Stéfano. Mientras, los canarios se complican su futuro y se quedan con 36, en puestos de descenso, teniendo que jugar la siguiente jornada en Navalcarnero, en lo que será otra final por conservar la categoría.

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