El antiguo internacional brasileño se encuentra estos días en la ciudad herculina debido a la 18ª edición del campus al que da nombre.

Aprovechando su visita, Mauro volverá a su segunda casa, Riazor, estadio en el que defendió la elástica del Dépor durante 13 años. Se trata de uno de los jugadores más emblemáticos de la entidad coruñesa o el que más, siendo el más votado en una encuesta sobre las leyendas históricas del Deportivo, en la web oficial del club.

Durante la presentación de su campus contestó a diversas preguntas, confirmando su presencia en el partido de este sábado a las 13:00h, encuentro que disputarán Deportivo y Málaga en el feudo gallego correspondiente a la 32ª jornada de la Liga Santander. En él, Mauro Silva recibirá el cariño de la afición blanquiazul.

"No acostumbro a llorar, pero volver a Riazor por primera vez desde 2005…", comentó el exfutbolista brasileño, admitiendo sentir añoranza por Coruña y su gente, a su vez que lamentaba no poder visitar Galicia tanto como a él le gustaría por diversos temas. En las instalaciones del INEF de Bastiagueiro, donde se lleva a cabo su campus, recibió la visita de Donato, a quien calificó como su mejor amigo en el Deportivo. 

"La ciudad y yo tenemos una relación que va más allá del fútbol, trasciende a la parte humana", explicaba Mauro, mostrando su cariño por el Dépor y lo mucho que significó para él, algo en lo que sin duda coincide la parroquia herculina, sorprendiento hasta al propio exjugador por la grana cogida que tuvo en su vuelta: " No me esperaba tanta gente, una expectación así", sentenció.

Mauro Silva se retiró en el 2005 después de 20 años como profesional, 13 de ellos en el Deportivo. A lo largo de su carrera sumó seis títulos con el club gallego (una Liga, dos Copa y tres Supercopas) y un Mundial y una Copa América con la selección canarinha.