Con cuatro puntos de seis posibles en las dos últimas visitas a Soria (0-2) y Tenerife (3-3), el Girona volvió a recuperar las sensaciones que había perdido en las tres jornadas anteriores, en las que no sumó frente a Cádiz (1-2) y Rayo (1-3) en casa y frente al Oviedo en el Carlos Tartiere (2-0). Esta noche tendrá otra oportunidad para seguir en esta dinámica y dejar atrás de una vez por todas la mala racha que encadenó hace un mes. Para ello deberá doblegar al UCAM de Murcia, que pese a lo que diga la clasificación, es un equipo duro de roer y que concede pocas ocasiones.

El 5 a 1 que le endosó el cuadro de Machín al Getafe hace un mes y medio debería ser el modelo perfecto para volver a la senda del triunfo en Montilivi, donde el equipo encadenó dos decepciones consecutivas antes de viajar a Soria y Tenerife en menos de una semana. Y, además, frente al Rayo se oyeron algunos silbidos durante el encuentro, con lo que recuperar la comunión entre la afición y los jugadores será clave, teniendo en cuenta que la mitad -cuatro- de los partidos que quedan de aquí hasta final de liga serán con el Girona como local. Una victoria hoy significaría dar otro paso más para el ascenso a Primera División, toda vez que Oviedo y Huesca -sexto y séptimo clasificados- empataron ayer a uno.

Mejora considerable

Por su parte, el conjunto universitario llega a la cita de Montilivi con dos puntos por encima de las posiciones de descenso. Tras una primera vuelta mala, con solo 20 puntos en 21 partidos, los murcianos prescindieron de José María Salmerón y la llegada de Francisco inyectó un soplo de aire fresco para un equipo que, tras ascender desde Segunda B, tenía la etiqueta de equipo candidato a volver a la categoría de bronce. Una buena racha en los siguientes 13 partidos, en los que ha conseguido 18 puntos, le ha permitido a UCAM salir de las posiciones teñidas de color rojo.

Eso sí, el equipo murciano ha sufrido dos derrotas en las últimas dos jornadas ante Oviedo (2-0 en el Tartiere) y Rayo (0-1 en la Condomina) que, sumadas a los dos empates cosechados en las dos jornadas anteriores (0-0 en Reus y 1-1 frente al Cádiz en Murcia), son cuatro ya las fechas que no consigue la victoria. Especialmente doloroso fue el tropiezo de la semana pasada frente al conjunto vallecano, porque además de ser un rival directo, el UCAM se topó en dos ocasiones con el poste y el meta Gazzaniga se convirtió en un auténtico muro para los universitarios.

Vestuarios

Pablo Machín hizo un llamamiento a la afición, de quien dijo que estará "seguro" animando al equipo. En relación con los silbidos que se oyeron en el último partido en el estadio, el de Gómara pidió que los aficionados rojiblancos "confíen, apoyen y sean fieles hasta el último minuto", y que, una vez haya concluido el partido, "hagan la valoración que crean oportuno hacer". Dado que Montilivi tiene una capacidad de espectadores que no llega a los 10.000, el soriano pedía que cada aficionado "anime el doble" para que el rival sienta un ambiente similar que en el Heliodoro Rodríguez López de Tenerife, donde el Girona se encontró a 20.000 almas.

El técnico local pierde para el partido por lesión a Cámara y por sanción a Eloi y Longo -ambos por haber visto la quinta amarilla en Tenerife-, y Maffeo, quien se perderá los próximos tres partidos por haber aplaudido al árbitro tras una roja excesiva. Machín lamentaba este hecho porque no creía que la entrada del lateral hubiera sido merecedora de expulsión, pero el aplauso posterior "podría haberse evitado". Sin embargo, Mojica y Granell vuelven a la convocatoria tras superar sus periodos de lesión. El colombiano difícilmente entrará de inicio, pero el mediocentro podría ocupar la vacante que deja el sancionado Eloi.

Por otro lado, Francisco confía en las posibilidades de su equipo en Montilivi, aunque es consciente de que el suyo es un equipo "recién ascendido" y visitan hoy el estadio del tercer mejor local. "Nos enfrentamos a rivales que se están jugando mucho en este tramo final de temporada", asegura el almeriense. El cuadro visitante tiene las bajas de su portero Biel Ribas, quien sigue sancionado por el puñetazo que le propinó a Quintanilla, del Mirandés, y de los lesionados Basha y el ex del Girona Kitoko, además de los lesionados de larga duración Cedrick y Luis Fernández.

Designación "polémica"

Las últimas dos derrotas de los murcianos llegaron tras sendos goles que no deberían haber subido al marcador por posiciones antirreglamentarias, por lo que la designación del colegiado gallego Rubén Eiriz Mata, al que se tacha de árbitro "casero", no ha gustado mucho en el seno de la Universidad Católica de Murcia. De los 18 partidos que ha pitado esta temporada el trencilla de 37 años, en 14 ocasiones el partido acabó en tablas o ganaron los equipos de casa, entre los cuales el propio UCAM frente al Numancia (3-2), en el que el cuadro soriano acabó desquiciado y con dos expulsados.

Francisco se refirió a esta designación en la rueda de prensa previa al partido. "Llevamos dos jornadas en las que los fallos arbitrales nos han costado dos goles en fuera de juego", lamentaba. La presión del entrenador iba a más. "Las imágenes están ahí. Nos duele que a este club no se le escuche a nivel nacional como se escuchan a otros equipos". Habrá que ver si las quejas del entorno murciano afectan a las decisiones del árbitro gallego.

Una vuelta en ascenso directo

El Girona volverá a enfrentarse al UCAM de Murcia una vuelta después del encuentro disputado en la Nueva Condomina. En el partido correspondiente a la jornada 15, los de Machín vencieron por 0 a 1 gracias a un tanto de Longo. Aunque la clasificación tras aquella jornada reflejaba que los catalanes eran terceros, con 21 puntos, realmente eran segundos porque el Sevilla Atlético, segundo con 23 puntos, no puede ascender por su condición de filial. Los de Montilivi no han soltado las posiciones de ascenso directo desde aquella jornada y con el paso de las jornadas se han ido consolidando como el segundo máximo candidato a subir, tras el imparable Levante.

Alineaciones probables

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