El Real Murcia llegaba al Municipal de La Roda con ganas de culminar una invasión de las que marcan época. Unos 2.500 aficionados pimentoneros coparon las gradas del coqueto estadio rodeño para animar a unos jugadores que pueden llevar al club hasta lo más alto esta campaña. La victoria balsámica conseguida ante un La Roda que apenas inquietó sitúa a los de Vicente Mir a las puertas de la promoción de ascenso.
El partido entre ambos conjuntos comenzaba con la alternancia típica en terrenos de juego reducidos como el Municipal. El conjunto murciano llevó el control del balón durante los primeros compases del encuentro, rondando continuamente el área de los de Pato, que supieron estar lo suficientemente bien plantados como para neutralizar el último remate de los granas. No sería hasta que se llegó al cuarto de hora cuando se produjo la primera ocasión clara para el Real Murcia. En una falta botada por el incombustible David Sánchez, Josema conectó un buen remate de cabeza que se encontró con las manos de Néstor Franco.
Sin embargo, sería una de las pocas acciones en las que los hombres de Vicente Mir tuvieron cerca el tanto en la primera parte. A pesar de las constantes incursiones de Curto y Guardiola en la zona de tres cuartos de campo, ambos delanteros cayeron varias veces en el fuera de juego, lo que llevó a desesperarse, sobre todo, al delantero criado en Jumilla. Mientras tanto, La Roda aguantaba sin especiales sobresaltos e incurriendo en frecuentes pérdidas de tiempo, conscientes de que un empate ante los pimentoneros era muy positivo para ellos. Connor y Palau fueron los hombres que más se probaron a la hora de conectar con Megías y Javi Bolo, pero los puntas del cuadro manchego apenas supieron inquietar a Simón.
En los últimos minutos del primer acto llegaría la oportunidad más importante para el Real Murcia. Nuevamente en un centro a saque de falta de David Sánchez, Josema tuvo el gol con otro gran remate de cabeza que consiguió atajar sobre la línea Néstor Franco. Antes de llegar al tiempo de descanso, los de Pato estuvieron cerca de irse por delante en el marcador si no hubiera sido por la mano que metió Simón a un venenoso centro-chut del extremo Pablo García.
Un ciclón en la segunda parte
Aunque el comienzo de la segunda mitad no fue tan frenético por parte del Murcia como en anteriores partidos, la entrada de Elady aportó tal frescura y velocidad al juego pimentonero que el gol parecía cuestión de tiempo. Y llegaría al cuarto de hora de la reanudación, momento en el que Armando disparó un fusil imparable que colocó en la escuadra del portero local. El golazo del cabezotorrense hizo estallar de alegría a toda la afición murcianista desplazada hasta el Municipal, en la que habían comenzado a instalarse los nervios con la victoria momentánea del Melilla en Córdoba.
Desde ese momento, los pupilos entrenados por Mir se lanzaron en tromba a buscar la sentencia que diera la tranquilidad de amarrar la posición de playoff durante, al menos, una jornada más. Fruto del empuje grana, las cosas se les pusieron más de cara con la expulsión por doble amarilla de Revert en el ecuador de la segunda mitad. Con uno más, el Real Murcia se lanzó definitivamente a por cerrar el partido, una meta que se empezó a fraguar con un 0-2 que llegó de las botas de Elady gracias a su rapidez para aprovechar un rechace de Franco a disparo de Curto. Casi sin tiempo para asimilar el segundo gol, la afición murciana vio cómo el ex del Mancha Real conseguía su doblete y el tercero para su equipo.
Con la victoria ya en el bolsillo, el cuadro dirigido por Vicente Mir continuó atacando con el goal-average general entre ceja y ceja, que puede acabar marcando diferencias en al final de la liga regular. Tras varios minutos de tanteo y algún que otro intento desesperado de La Roda por crear peligro en ataque, Diego Benito incrustó el esférico en el fondo de la escuadra local tras una buena asistencia de Adri Cruz, que regresaba al césped después de perderse los últimos encuentros por lesión. Instantes antes de que el colegiado decretara el final de la contienda, David Sánchez pudo coronarse con la ‘manita’, pero su vaselina fue atajada por Néstor Franco.
A las puertas de la promoción
Con la goleada conseguida en La Roda, el Real Murcia tiene en sus manos jugar la promoción de ascenso a Segunda División ‘A’, que arranca en apenas dos semanas. De hecho, si el Mérida no vence en su visita a El Ejido, el club pimentonero será matemáticamente equipo de playoff. En el caso de que los de Eloy Jiménez consigan la victoria, los murcianos seguirán dependiendo de sí mismos para culminar su particular carrera de fondo ante el Extremadura, que podría llegar salvado a la última jornada.
Por su parte, La Roda cerrará la campaña precisamente en el Estadio Romano, donde tratará de irse con un buen sabor de boca antes de iniciar su periplo por Tercera División. Un resultado positivo de los de Pato podría privar definitivamente a los emeritenses del sueño de disputar la liguilla de ascenso, en el caso de que lleguen con opciones tras su partido en tierras almerienses.