Ambiente de fútbol puro, dos ciudades históricas se disputaron en la tarde del domingo la categoría, desde media mañana las dos aficiones se encontraron por el centro de Linares, los cuatro autobuses de aficionados que vinieron desde Burgos aprovecharon para probar la gastronomía linarense. Los visitantes fueron los primeros en llegar al campo, escoltados por policía, se acercaron las seis de la tarde, hora de la cita de más de siete mil personas.

El balón comenzó a rodar y los pupilos de Juan Ferrando salieron con las ideas claras, los locales tenían que marcar y pronto si no querían verse superados. La primera ocasión la tuvo Corpas por la banda derecha, que tras marcharse del defensa disparó a la portería defendida por Aurreko que estuvo providencial. Los visitantes avisaron de su peligro a balón parado durante el partido de ida y confirmaron este presagio con el primer gol. Odei, sin marca, da el pase de la muerte a Diego Suárez tras un centro de Prosi, despiste de la defensa minera que no estuvo fina durante toda la temporada en el balón parado.

A partir del gol del conjunto burgalés el ritmo del partido incrementó ya que los azulillos debían marcar dos goles, ocasiones para ambos bandos, Chus Hevia por parte del Linares peleó todos los balones y dio el susto en un despeje del guardameta, el encuentro se marchó al descanso con la sensación de la parroquia azulilla de que se podía hacer un poco más.

El equipo visitante continuó haciendo su papel durante la segunda mitad, ellos solo tenían que aguantar. Los mineros tardaron un poco en reaccionar al resultado, Ferrando introdujo a Casi y posteriormente a Gámiz en el terreno de juego para dar más movilidad, las ocasiones andaluzas se sucedieron, en una de ellas Chus Hevia logró anotar el empate a uno, gol que levantó el Municipal de Linarejos a falta de ocho minutos para la conclusión. El equipo local siguió peleando, los burgaleses defendieron para no encajar el segundo gol.

Con todo el Linares Deportivo arriba, el fallo era inminente, cumplido el minuto noventa, Gonzalo intentó adelantarse el balón, el rival recuperó el balón con dos hombres defendiendo por parte de los locales, el balón le llegó a Montero que remató a placer, uno a dos y el Burgos que el año que viene estará una división por encima del Linares.