Jan Oblak ha firmado otra temporada espectacular en el club colchonero. El esloveno ha dejado números realmente asombrosos que le han colocado como el portero menos goleado de LaLiga.

Empezó la temporada en buena forma, ayudando al equipo con grandes paradas y siendo imbatido en varios partidos. Pero la situación se torció en la jornada 15, en el partido contra el Villarreal, cuando Oblak recibió un fuerte golpe en el hombro y tuvo que ser sustituido. Después del partido fue sometido a varias pruebas y finalmente se le diagnosticó una luxación en el hombro izquierdo, por lo que tuvo que ser operado en Londres. Se estimaba entre tres y cuatro meses de baja. Fueron muy malas noticias para el Atlético.

Regresó de su lesión en un gran estado de forma

Dos meses y medio después, Jan Oblak volvió a la lista de convocados para el partido de ida de los octavos de Champions frente al Bayer Leverkusen, y recuperó la titularidad el siguiente partido de Liga contra al Barcelona. Regresó antes de lo previsto y mejor que nunca. El arquero esloveno hizo un final de temporada sensacional, dejando un registro final de 21 goles encajados en 29 partidos en LaLiga. Se convirtió así en el trofeo Zamora de la liga española por segundo año consecutivo.

Ante el Bayer Leverkusen firmó una triple parada antológica

Además, Jan Oblak dejó una de las mejores paradas de la temporada en el partido de vuelta contra el Bayer Leverkusen en el Vicente Calderón, donde realizó una triple parada en un mano a mano que levantó a todo el estadio de sus asientos y dejó boquiabiertos a muchos aficionados del fútbol en todo el mundo.

Oblak ha sido, sin lugar a dudas, uno de los mejores jugadores del Atlético de Madrid esta temporada. Ha salvado al equipo en muchos partidos con sus paradas y ha dado un plus de seguridad al equipo con él bajo los palos. Ya lo venía demostrando años anteriores y una vez más, se ha consolidado como una pieza fundamental en el planteamiento de Simeone. Hoy en día es considerado como uno de los mejores porteros del mundo.