La Nueva Condomina se vistió de gala, se tiñó de grana -y blanquinegro- y se echó a presenciar toda una semifinal de un play-off de ascenso a Segunda División entre dos de los mejores equipos de la categoría. Murcianos y valencianos se enfrentaban por un mismo sueño, el ascenso. Los de la capital del Turia partían con un mínimo de ventaja sobre los de la ciudad pimentonera pero, aún así, no era ninguna garantía el 2-1 cosechado en la ida.

Vicente Mir y Curro Torres pusieron sobre el verde del estadio murcianista sus mejores galas para tratar de mantenerse con vida en la fase de ascenso a la categoría de plata del fútbol nacional. El técnico valencianista dejó en el banco a su máximo artillero, que volvía tras lesión, en detrimento de Alberto Gil, que fue el asistente en el segundo tanto de Quim Araujo en el partido de ida en Mestalla.

Poco fútbol, menos ocasiones

El encuentro arrancó con un ritmo frenético donde ambos conjuntos trataban de provocar un error en las filas contrarias para adelantarse en el marcador. Como pasó en la ida, el duelo no estaba sólo sobre el verde, pues en la grada ambas aficiones rivalizaban entre ellas y trataban de hacerse escuchar, sobretodo la minoría valencianista ante una hinchada murciana que no cesaba de apoyar a su equipo.

Con el paso de los minutos el ritmo no bajó en demasía y era el Mestalla quien más fútbol proponía a pesar de no tener ocasiones claras de gol, salvo una provocada pasados los veinte minutos nacida en las botas de Quim y finalizada por Eugeni, que no consiguió conectar un buen disparo y acabó en las manos de Simón.

Durante toda la primera mitad hubo un duelo independiente entre Zotko -central del Valencia Mestalla- y la pareja de ataque del Real Murcia -Guardiola y Curto- que no pararon de dejarse recados los unos a los otros.

Se notó el murmullo de la afición pimentonera cada vez que el equipo local pasaba la línea divisoria, sin embargo, en ninguna ocasión fue más allá y las aproximaciones murcianistas se quedaban en nada.

Quim durante el partido ante el Murcia. | Imagen: www.valenciacf.com
Quim durante el partido ante el Murcia. | Imagen: www.valenciacf.com

El Mestalla supo sufrir

La segunda mitad siguió el guión escrito en la primera. El Murcia lo intentaba con jugadas creadas por la casta y el orgullo, pero el Mestalla evitó en todo momento que el peligro rondase la meta defendida por Sivera, un portero que minutos después sería el héroe en la Nueva Condomina.

Vicente Mir movió el banquillo para meter pólvora en el ataque, pero los cambios, pese a que dieron más protagonismo al equipo pimentonero en la zona de tres cuartos de cancha, no surgieron el efecto esperado por el técnico valenciano.

Poco a poco, los locales fueron buscando el gol, pero el férreo entramado defensivo propuesto por Curro Torres, que dio entrada a Javi Jiménez en los minutos finales para asegurar el pase a la final de la promoción de ascenso a Segunda, renunciando ligeramente al centro del campo.

En la última media hora de partido se concentraron todas las ocasiones de gol, casi todas por parte murcianista, pero fruto de la desesperación de los pimentoneros, que no encontraban portería, la ansiedad se apoderó de los de Vicente Mir y permitió a los valencianos tener alguna jugada de peligro que hubiera cerrado por completo la eliminatoria.

Una vez finalizado el encuentro, la fiesta la montaron los casi mil aficionados valencianistas que se desplazaron a la Nueva Condomina, que celebraron la clasificación en comunión con el equipo, como se merecía la ocasión.

En la final, los de Curro Torres se medirán al Albacete en una eliminatoria a doble partido. La ida será en Mestalla y la vuelta en el Carlos Belmonte.