La vida te pone obsáculos, retos o dificultades de todo tipo, pero como buen luchador debes saber sobreponerte a ellas, dando tu mejor versión. Esto es lo que ha hecho Iván Alejo a lo largo de su corta, pero complicada carrera deportivo, en la que ha tenido que competir en canteras como la del Villarreal o la del Atlético de Madrid. Clubes en los que hacerse con un sitio resulta, prácticamente, imposible. A veces, la mejor manera de superar dichos obstáculos puede ser tomar otros caminos, en busca de oportunidades. Así lo hizo "Ivi", al salir traspasado rumbo a Alcorcón, para contar con más minutos y adquirir experiencia en una categoría de mayor exigencia. Tras haber completado una campaña digna de un jugador de Primera, ha logrado el premio de formar parte de un conjunto de la máxima categoría del fútbol español. Ha sido la Sociedad Deportiva Eibar, el cuadro que ha apostado y ha confiado en él, al otorgarle el privilegio de ser miembro de la plantilla en la temporada 2017/18. 

Explosivo como nadie

Si por algo destaca el bueno de Iván es por ser un jugador explosivo, de esos que dejan a rivales atrás con su aceleración. La velocidad es su principal arma, de la que saca mucho partido. Partiendo desde los costados hace mucho daño a los adversarios, los que sufren sus constantes internadas al área y a los que les resulta todo un reto alcanzarlo cuando inicia sus clásicas cabalgadas. Para llevar a cabo dichas internadas con efectividad, es necesario hacer uso de la zancada que tan bien lo caracteriza. Es un jugador de banda. No tiende a desplazarse hacia el pasillo central con tanta frecuencia como otros muchos extremos, al ser un jugador verdaderamente rápido saca su mejor versión escorado en banda

¿Tiene sitio?

Una cuestión para la que no hay respuesta, de momento. A día de hoy, la mayoría diría que no, pero quién sabe. Todavía tiene la pretemporada por terminar y en ella se verá si está capacitado para ser titular. En estos instantes, tiene a Pedro León, Takashi Inui y Rubén Peña por delante, si a eso se le suma la variante de Bebé para jugar en banda, aumentaría el número de competidores por un puesto. A su favor, Alejo cuenta con la ilusión y ganas requeridas para trabajar cada día como si fuera el primero, además de ser joven y tener talento, mucho talento.

Dicho esto, el fichaje de Iván Alejo es acertado, a corto y largo plazo. A sus 22 años tiene tiempo para triunfar y en el entorno eibarrés esperan que sea en su equipo, en la SD Eibar.

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Sobre el autor
Joseba Ormazabal Fernández
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