Venció el CD Leganés por 0-1 frente al RCD Espanyol en una victoria sufrida pero muy lograda gracias al buen hacer de los jugadores de Garitano. El conjunto 'pepinero' se mostró muy sólido y muy férreo tanto en lo táctico como en lo esquemático. Un 4-2-3-1 donde Guerrero era el referente en ataque, Omar Ramos y Szymanowski los puñales que tanto ha echado de menos el 'Lega', Pires en la media punta, y un doble-pivote duro y rocoso como son Eraso y Rubén Pérez. Atrás, línea de cuatro formada por Diego Rico, Mantovani, Muñoz y Zaldua; y en portería, el fijo Cuéllar.

El CD Leganés venía confiado y con la moral subida debido a su buena pretemporada y al buen choque que cuajó en Butarque en la primera jornada de liga frente al Alavés. Los de Garitano supieron aguantar las fases duras del partido y saber darle el zarpazo en el momento exacto a los vascos. Tras este choque, el partido frente al Espanyol se preveía sobre el papel como uno de los choques más difíciles ya que es un estadio que siempre es muy complicado. El año pasado sin ir más lejos, los de Garitano se volvieron a Madrid con un 3-0 en el marcador.

El esquema, fundamental

La primera parte fue dominada por el esquema del Leganés. Presión sin balón sobre el medio campo rival. La consigna era clara y la ejecución mejor todavía. El CD Leganés iba fuerte y contundente sobre la marca del equipo local y los 'pericos' no sabían reaccionar. Inició fuerte el conjunto de Garitano con un disparo de Eraso que pasó por encima del arco defendido por Pau. Al Espanyol le seguían creciendo los enanos ya que se lesionó Javi López. No había laterales derechos y tuvo que entrar Granero donde tras una carambola, hacía que Hernán Pérez pasase a jugar de carrilero. Llegados al minuto 30 de partido, Pau despejó dos balones en el área a remates de Gabriel y Szymanowski respectivamente, pero no pudo con el tercero de Mantovani, que finalmente consiguió anotar.

A la vuelta del descanso, la vida seguía igual. Un CD Leganés que se basaba en el esquema y en la presión sin balón sobre medio rival. Los de Garitano se sentían cómodos así y no mostraron ninguna muestra de cansancio, pese a ser una labor muy complicada. Los balones pericos no llegaban a la punta de ataque por lo que los locales no crearon peligro. Algunos destellos de Jurado y Gerard Moreno, pero no ponían en peligro a Cuéllar. Quizá la más importante para el cuadro local llegó de la mano de Leo Baptistao cuando estuvo a punto de poner la igualada en el marcador tras conectar un buen remate. El Espanyol ya iba a por todo y sacó a su jugador franquicia, Sergio García, quien aportó algo nuevo a la punta de ataque perica. Nada más lejos de la realidad ya que el Leganés echó bien el cerrojo y supo mantener el resultado en todo momento. En el tiempo de descuento Gumbau tras una galopada tuvo un mano a mano con Pau pero el centrocampista echó el balón a sus manos despreciando una grandísima oportunidad.

Con el 0-1 llegamos al final del partido y el CD Leganés se alzó por segunda jornada consecutiva con una victoria en su casillero. Cierran la jornada siendo terceros, a dos puntos del cuarto clasificado que es el Atlético de Madrid. La jornada número tres será en Butarque, el viernes 8 de septiembre a las nueve de la noche frente al Getafe. Derbi por excelencia madrileño en un escenario nunca visto antes, en la máxima categoría del fútbol español.