Aterrizaba José Luis Oltra con la clara consigna de continuar su excelente racha como técnico visitante en el estadio en el que se consagraría como un entrenador de prestigio en el fútbol nacional. El preparador valenciano parecía siempre atragantárse al CD Tenerife cada vez que rendía visita al recinto de la calle San Sebastián, y tal y como se dio el inicio del encuentro todo indicaba que la historia transitaría por los mismos derroteros.

El Granada golpeó primero

José Luis Martí, para sorpresa de asiduos y extraños, decidió dejar a Samuele Longo fuera de la alineación titular y dio entrada en su lugar al canterano Brian Martín. El delantero transalpino no se encontraba aún al 100% físicamente para poder disputar los noventa minutos desde el inicio y tuvo que esperar su oportunidad desde el banquillo.

El partido comenzó con mucha igualdad, sin ninguna llegada clara para cualquiera de los dos equipos. Sin embargo, los andaluces lograron desnivelar el marcador a su favor tras un saque de esquina ejecutado por Pedro (min. 18). Entre Aitor Sanz y Adrián Ramos, el balón se introdujo en la portería defendida por Dani Hernández y la decepción invadió las gradas del Rodríguez López.

El hecho de verse por detrás espoleó a los locales

Lejos de venirse abajo, el conjunto tinerfeño tiró de casta y generó numerosas aproximaciones al arco de Javi Varas. Tan solo dos minutos tras el tanto visitante, Tayron rozó el tanto con un disparo lejano y posteriormente, Brian Martín lo intentó de chilena, aunque sin éxito (min. 28). El Tenerife buscaba hacer daño por bandas aprovechando las continuas galopadas de Camille, que también probó suerte desde el pico del área con un fuerte disparo que detuvo el guardameta andaluz (min. 31).

Prácticamente el Granada no acumuló ningún otro acercamiento al área blanquiazul y con el 0-1 en el luminoso se llegó al descanso. La actuación del colegiado, muy protestada por la hinchada local, llevó a una sonora pitada dirigida al trío arbitral cuando éste se disponía a atravesar el túnel de vestuarios.

Los jugadores del Granada celebran el primer gol de la mañana. Fuente: granadacf.es
Los jugadores del Granada celebran el primer gol de la mañana. Fuente: granadacf.es

Los cambios en el segundo acto, claves en el resultado

Tras la reanudación, Martí dio entrada a Longo en sustitución de un Juan Carlos que prácticamente había pasado desapercibido durante la primera mitad. Con esta modificación del once Brian Martín pasaba a ocupar la banda izquierda, con Tayron por detrás del italiano y Suso en el perfil diestro. La presencia del ex futbolista del Girona fue notoria desde el primer balón con el que contactó: el poder físico, juego aéreo y técnica que aporta Samuele al ataque tinerfo le presta un salto de calidad al equipo. A pesar de todo, el Tenerife seguía sin encontrar el camino hacia el gol.

A los diez minutos del inicio del segundo tiempo Malbasic debutó como blanquiazul en el Heliodoro en detrimento de Brian, que se marchó ovacionado. El atacante serbio se ubicó en la misma posición del futbolista al que sustituyó, con la intención de crear mayor peligro en el área rival. El Tenerife mejoró notablemente con ambos cambios, pero se le resistía la fortuna de cara a la realización. La nota negativa del encuentro la puso Suso Santana, expulsado en el minuto 65 tras una rencilla con un futbolista visitante. El capitán, que había sido amonestado en la primera mitad, vio la segunda amarilla y tuvo que abandonar el césped dejando a su equipo con diez efectivos. El encuentro parecía ponerse definitivamente cuesta arriba a los locales.

Sin embargo, en una aislada jugada a balón parado, servida por Aitor Sanz al área granadina, Jorge Sáenz la dejó de cabeza para el remate a puerta vacía de Samuele Longo (min. 72). Con un futbolista menos, el CD Tenerife había conseguido volver a nivelar el encuentro y Martí no parecía conformarse con el empate: acto seguido dio entrada a Montañés por Tayron.

De la euforia a la decepción

Parte de la entrada del interior castellonense también llevaba por objetivo el hecho de reforzar defensivamente la banda derecha, que había quedado huérfana tras la expulsión de Suso, dejando únicamente a Luis Pérez como defensor frente a dos futbolistas locales. A pesar de todo, el Tenerife no se arrugó y a través de contraataques trataba de lograr el 2-1.

El gol de la remontada insular llegó tras una buena maniobra de Longo en el centro del campo, donde logró zafarse de dos defensores y servir un pase en profundidad para Malbasic. El serbio, con la pierna derecha, no perdonó y colocó el balón imposible para Javi Varas (min. 89). El delirio se apoderó de las gradas y la victoria canaria parecía un hecho.

El cuarto árbitro indicó que se debían jugar tres minutos de añadido cuando, tras un centro al área local, Jorge introdujo el cuero en su propia portería tras una indecisión con Dani Hernández. Parece que la falta de comunicación fue la razón de tan desafortunada jugada, que marcó el desenlace del encuentro. El Tenerife, que continúa invicto en su feudo, se sitúa en una cómoda posición (7 puntos) y ya piensa en los dos encuentros que deberá afrontar próximamente en el Nuevo Arcángel de Córdoba.

Los futbolistas locales hacen piña tras el 1-1. Fuente: clubdeportivotenerife.es
Los futbolistas locales hacen piña tras el 1-1. Fuente: clubdeportivotenerife.es