El Real Madrid comenzó este lunes los entrenamientos de una nueva semana de competición liguera tras el parón de selecciones. Pese a que varios de los jugadores de la plantilla todavía se encuentran concentrados con su país, Zinedine Zidane ya dio comienzo a la preparación de cara al encuentro del fin de semana frente al Getafe.

La novedad en la sesión fueron las caras nuevas: Fidalgo, Franchu, Seoane y Quezada, del Castilla, estuvieron a las órdenes del míster, así como Toni Kroos. El alemán, que fue baja en el partido de Alemania frente Azerbaiyán por seguridad, regresó a Madrid con la preocupación del estado de sus costillas, pero tras pasar por la enfermería del club el servicio sanitario determinó que estaba en condiciones de unirse a sus compañeros y realizar la sesión completa.

Por su parte, Mateo Kovacic, Bale y Carvajal permanecieron en el interior de las instalaciones, continuando con sus respectivos procesos de recuperación. En cuanto termine el actual periodo de clasificación para la Copa del Mundo de Rusia 2018, los jugadores convocados por las selecciones regresarán a Madrid para su puesta a punto para el fin de semana. 

Dada la situación de la plantilla, la sesión fue baja en carga física: tras el calentamiento y los rondos, los jugadores realizaron una serie de ejercicios de posesión y circulación del balón. En cinco días el equipo visita al Getafe de Pepe Bordalás, que está cuajando un grandísimo inicio de temporada. Pese a haber jugado ya contra rivales de la talla del Villarreal, Atletico de Madrid, Sevilla o el propio Barça, los azulones marchan duodécimos en la clasificación con diez puntos, a una victoria de puestos europeos. Los anteriores pinchazos y la racha ganadora del Barça obliga al Real Madrid a sumar los tres puntos sí o sí, aunque no lo tendrá nada fácil.