Hay cosas inherentes al fútbol. Como que el lateral derecho luzca el '2' o el todocampista el '8'. Aunque, para bien o para mal, el fútbol moderno está cambiando la estética preconcebida en estos casos y solo en el fútbol base -y con pinzas- se mantiene esta dinámica. Pese a ello, aún quedan futbolistas que saben reivindicar cuál es la tarea del dorsal que llevan.

Por definición, el futbolista que porta el '9' es el encargado de transformar los goles, de batallar con los '4' y '5' -cuya suma es, precisamente, nueve-, de ser el hombre más reconocido de un equipo y, como tal, recibir críticas a diestro y siniestro tras los partidos. La mayoría de ellas de una connotación destructiva, más que constructiva. Están siempre en el ojo del huracán y cuando las cosas funcionan, la música suena, pero cuando no son así... -aunque bien es que dentro de sus funciones, también se encuentra la de acallar las propias críticas-.

Sanabria ha hecho historia

Este es el caso de Tonny Sanabria. El Real Betis vive un momento dulce y pese a dejarse puntos por el camino, sigue ilusionando igual, o más, que en el primer día. Uno de los artífices del clímax verdiblanco es Tonny Sanabria. El paraguayo está disfrutando de una gran forma física y ha sabido traducir su estado anímico en goles y puntos. El sudamericano ha conseguido pasar del ostracismo a las primeras planas y además ha entrado de lleno en la historia del equipo de las Trece Barras.

Gracias al tanto que anotó ante el Deportivo Alavés, Sanabria se ha unido al selecto club de únicos jugadores verdiblancos en anotar en cinco jornadas consecutivas. 

Un dorsal sin dueño 

Desde que echó a andar el siglo XXI, los jugadores que han defendido el '9' verdiblanco han sido: Amato, Fernando, Sergio García, Jonathan Pereira, Vadillo, Chuli y van Wolfswinkel. De todos, tan solo los tres primeros de la lista supieron rendir a un alto nivel. Después de varias temporadas sin un claro portador, Sanabria cogió el dorsal. No obstante, las cosas invitaban a pensar a que la historia acabaría como las anteriores, pues entre las lesiones y Rubén Castro, el guaraní solo firmó tres goles en su primera temporada.

Dispuesto a cambiar el trascurso de los hechos, Sanabria está demostrando que esta temporada es la suya. Asimismo, ha logrado lo más difícil: hacer olvidar a Rubén Castro. El paraguayo suma seis tantos hasta la fecha y ha conseguido volver a dar sentido a la definición de '9', así como la ilusión a los más pequeños que sueñan con anotar goles con su equipo. El nuevo ídolo del Villamarín.