El Athletic de Bilbao recibirá esta noche en su casa al F.C. Barcelona de Ernesto Valverde, quien fuera el entrenador del club vasco durante varias temporadas. Durante su etapa en el Athletic, el Txingurri dejó huella por las exitosas campañas que consiguió con el equipo. En sus cuatro temporadas se llevó una Supercopa de España, que arrebató de forma brillante al que ahora es su actual club, además de un subcampeonato de Copa del Rey en 2015. Por todos estos motivos, la vuelta de Valverde a San Mamés supondrá un cariñoso reencuentro con su antigua hinchada.

El estilo del actual Athletic de Bilbao

Aunque en la etapa de Valverde también se utilizaba en muchas ocasiones en 4-2-3-1, otros estilos como el 4-4-2 estaban muy presentes. Actualmente, el equipo de José Ángel "Kuko" Ziganda opta por el primero, ya que se adapta mejor a los jugadores habituales para el entrenador. Con este esquema de juego, Ziganda propone un once siempre plagado de centrocampistas que actuen como referencia para distribuir el juego. El Barcelona sufrirá al tratar de sacar el balón jugado desde atrás, como suele hacer habitualmente, debido a la presión asfixiante que proponen los vascos, comenzando con los hombres de arriba y pasando por empujar al equipo desde la zona baja del campo.

Las bandas también son un personaje principal en el dibujo de este Athletic. El juego desde el medio del campo siempre se trata de llevar a las bandas para que las acciones terminen con un remate del delantero, que espera el centro desde los laterales. Es por ello por lo que algunos futbolistas como Raúl García o Beñat tienen una importancia vital para que el juego del equipo mejore en cada partido.

La situación de los rojiblancos

No llega el conjunto de Bilbao en su mejor momento al partido contra el Barcelona. Después de algunos empates un tanto forzados como el de Europa League, en los últimos minutos, o el de Málaga, se ha cuestionado ligeramente la identidad del Athletic. Los seguidores empiezan a cuestionar qué ocurre con el estilo de juego y por qué no está funcionando como en año anteriores en los que la plantilla no era muy diferente a la actual. El equipo sigue buscando su sello y hoy, ante el Barcelona, tendrá una nueva oportunidad de demostrar que tiene potencial para competir como siempre ha hecho.