No pudo puntuar el Sevilla en su visita al Camp Nou. A pesar de plantar cara al líder, cayó derrotado por dos goles a uno. Paco Alcácer asumió los galones de héroe y consiguió un doblete. No había contado mucho con él Valverde hasta el momento, pero decidió apostar por él ante el Sevilla. Le salió bien la apuesta, para desgracia de los sevillistas.

Comenzó la primera mitad con dominio culé. Les costó a los sevillistas entrar en el partido. Los locales disfrutaron de numerosas ocasiones en los primeros minutos, que no llegaron a materializar. Los visitantes trataban de salir al contraataque, sin éxito. Tras tres ocasiones claras por parte de los culés, Muriel tuvo la primera para los sevillistas. Encaró a Piqué y su tiro se marchó desviado. Replicó el Barcelona con un tiro desde fuera del área de Iniesta que también se marchó desviado.

Llegó el gol

En el minuto 23, un balón en largo de Suárez desde la línea de medio campo cayó en los pies de Alcácer para hacer el primero. Error garrafal de Escudero, quien tocó el balón. Pero su desvío, más que para despejar el peligro, sirvió para acomodarle aún más el balón al delantero culé, quién definió al primer toque ante David Soria. Subía el 1-0 al marcador. El error de Escudero fue una muestra de la espesa actitud de todo el equipo sevillista en los primeros minutos.

Respuesta sevillista

Salió con una actitud completamente distinta el conjunto sevillista. Estaban decididos a darle la vuelta a la situación, a empatar para soñar luego con la victoria. A los dos minutos del comienzo de la segunda mitad, Muriel tuvo una clara ocasión. Su disparo se marchó un poco alto. Sigue sin tener demasiada suerte el colombiano de cara a portería. En el minuto 59 llegaría el empate. La respuesta sevillista se materializó en un cabezazo de N’Zonzi para devolver la esperanza a los visitantes. Botó Banega el corner, y N’Zonzi se elevó para adelantarse a Piqué y mandar el balón al fondo de la red. Un auténtico golazo.

Duró poco la alegría

De nuevo, Paco Alcácer. Tan solo seis minutos después, el exsevillista Rakitic centraba al corazón del área sevillista. Alcácer se adelantó a Kjaer y anotó el segundo gol de su equipo y de su cuenta particular. No se movería más el marcador. Tras el segundo y definitivo gol culé, los locales tuvieron la posesión. Los visitantes fueron incapaces de generar ocasiones claras para igualar de nuevo el encuentro y poder puntuar.