La figura del mediapunta es esencial para que el sistema usado por Oltra (4-2-3-1) funcione. En esa posición está rindiendo a un alto nivel un futbolista llamado a ser importante en este Granada, Javier Espinosa. El canterano azulgrana ha conseguido afianzarse en el once gracias a las buenas sensaciones que ha dejado en los últimos compromisos ligueros.

Clave en el juego de posición

Espinosa es el enlace perfecto entre la sala de máquinas y los tres hombres de ataque. El jugador cedido por el Levante nutre de balones perfectos a las dos flechas que tienen los andaluces en las bandas como son Pedro y Machís. Además, la facilidad que tiene para desbordar le convierte en el futbolista idóneo para la mediapunta.

Además de ser el encargado de enlazar los mediocentros con la delantera, Espinosa también posee llegada. El manchego suma un tanto y una asistencia en diez partidos con la camiseta rojiblanca. Pese a que los números no son de grandes magnitudes, sus compañeros saben que cuando el balón pasa por sus botas solo pueden pasar cosas buenas. El buen trato de esférico predomina por encima de los datos. Para marcar goles ya están los de arriba.

Dueño y señor de la mediapunta

La aparición de Sergio Peña este curso en el primer equipo del Granada podría haber complicado el devenir de Espinosa en el conjunto nazarí. Pero el manchego está rindiendo a tan buen nivel que nadie reprocha a Oltra los pocos minutos que está disponiendo Peña. Cabe destacar que el sudamericano empezó contando para Oltra, pero una lesión de este le ha servido a Espinosa para adelantarlo por la derecha y sin intermitente.

Si además tenemos en cuenta que el peruano se marcha esta semana con su combinado nacional, se presupone que Espinosa tendrá mucha continuidad en esa zona del campo. Sacarlo del once, si sigue jugando como hasta ahora, será muy complicado.  

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