El tema de la formación del Alavés ha estado dando vueltas en la cabeza de los aficionados durante semanas. ¿Mejor tres centrales y dos carrilleros? ¿Es preferible una línea de cuatro atrás? El último episodio del lustro de De Biasi en el Alavés, el derbi ante el Eibar, terminó con línea de cuatro atrás, con similar resultado que cuando se han alineado a cinco jugadores en defensa.
Defensa de cinco.
El preparador italiano, vendió desde el inicio de su etapa que lo primordial para crecer como equipo, era cortar la hemorragia de goles recibidos. A partir de ahí llegarían los resultados. Empezó probando el sistema ante el Levante con marcador a favor en la segunda parte y lo acabó implantando contra el Betis en Sevilla.
Con solo dos laterales disponibles, Vigaray y Duarte, nunca tuvo confianza ciega en ellos
De Biasi se enroscó en sus últimos partidos con esa línea de tres centrales, por la que circularon Maripán, Rodrigo Ely, Diéguez y Alexis; normalmente saliendo uno de ellos del once, bien Diéguez o bien el chileno. Con Rodrigo Ely y Alexis como hombres fijos, las dudas venían con los carrileros. Con solo dos laterales disponibles, Vigaray por la derecha y Rubén Duarte por la izquierda, De Biasi nunca tuvo confianza ciega en ellos. De hecho, ha estado insistiendo hasta el partido de Getafe con Pedraza como carrilero izquierdo; se perdía a una de las sensaciones del Alavés en ataque. Se notaba que Pedraza no jugaba en su sitio y le costaba tanto defender, como llegar con claridad a área contraria. En el carril derecho, en varios partidos prefirió a Alexis de carrilero, donde el malagueño muestra algunas carencias en detrimento de Vigaray.
Con esta formación, el objetivo del entrenador tampoco llegó de forma desmedida, encajando goles y perdiendo los partidos, excepto contra Levante y Espanyol.
Jugar con cinco atrás, daba pocas bazas al equipo vitoriano de poder construir juego, de tener la pelota, aspecto que tampoco buscaba el equipo con el técnico italiano. Si así no se consiguen los puntos, el planteamiento se quedaba en nada.
Rubén Duarte ante Iván Alejo. Fotografía: LaLiga
Defensa de cuatro.
La vuelta a la defensa de cuatro ante el Eibar, con dos centrales y dos laterales, fue buena como idea, aunque con cierto matices. El lateral derecho volvió a ser un central, Alexis, que tuvo que abandonar el terreno de juego a los 8´minutos por un traumatismo cervical, sustituido por Vigaray que tenía por delante a Ibai Gómez. De esta manera, al menos la defensa se compuso por dos laterales en su puesto y dos centrales; en este caso fue Diéguez el que no fue de la partida, quedándose incluso fuera de la convocatoria. Cuando muchos esperaban a Duarte por el carril izquierdo en defensa de cuatro, se frotaban los ojos al ver que Pedraza no salía en el once en el derbi vasco. Medrán y Munir tuvieron que empezar viendo también el partido en el banquillo; incluso el cordobés no llegó ni siquiera a jugar.
Ahora con Javier Cabello al frente del equipo como mínimo en Copa, veremos cómo vuelve a disponer las líneas del Deportivo Alavés.