La lesión de Antoine Griezmann no implica solamente malas noticias en el Club Atlético de Madrid. Es el turno de los jugadores que la mayor parte del tiempo están en la sombra. Ha llegado el momento de Ángel Correa, la perla argentina. El natural de Rosario tiene por delante diez días de duro trabajo, pues desde que se ha confirmado la ausencia del ariete francés todo apunta a que Diego Pablo Simeone apostará por sus servicios en el Benito Villamarín este fin de semana y en el Estadio Metropolitano el próximo.
Cambio de fichas rojiblancas
Por supuesto que no contar con el galo supone perder numerosos aspectos bastante complicados de paliar. Gol, potencia, movilidad y movilidad, las características más destacadas del número 7 colchonero. Pero el sudamericano protagonista de estas líneas está en un fantástico momento de forma. Su polivalencia y determinación han servido para demostrar al Cholo que también es capaz de rendir al máximo nivel desde la posición de interior derecho, ya que la irregularidad de Yannick Carrasco y Augusto Fernández han provocado un problema en dicha banda. Y si bien el rosarino ya ha certificado su buen hacer en la mencionada demarcación, quiere volver a hacerlo en la delantera, donde más cómodo se siente.
Esta temporada, Ángel Correa promedia cuatro goles y una asistencia en apenas 14 partidos disputados de campeonato liguero. Que no completos, pues solo ha podido gozar del 70% de los minutos totales. Ahora, ante Real Betis y Getafe, tendrá ciento ochenta más para meter en un gran problema a Simeone: el elegir puntas de lanza a partir de enero. Con las llegadas de Diego Costa y Vitolo, sumado a la calidad de Antoine Griezmann y Kevin Gameiro, junto a la más que posible explosión del internacional argentino, el técnico podría aventurarse con un 4-3-3 que cada día parece más evidente.
El jugador que defiende el dorsal 11 puede ser el culpable de dicho proceso de cambio. Diego Pablo confía en él ciegamente, y así lo ha querido mostrar en una reciente entrevista a un medio de comunicación de su país natal: "Correa llegó siendo un buen futbolista individualmente, pero hoy es mejor jugador colectivamente respecto al que vino. No tengo ninguna duda. Ahora lee jugar en posiciones que antes no leía. Angelito va camino de crack porque tiene el talento, el giro, el uno contra uno, el sacar imaginación donde nadie lo espera. Es un jugador muy completo".