Saltaron al campo ambos conjuntos con la obligación de llevarse los tres puntos. El Athletic lo haría con un 4-2-3-1 con De Marcos como extremo derecho por delante de Lekue y Susaeta como extremo izquierdo. Mientras que el Levante saltaría con su ya conocido 4-5-1 en el que en fase defensiva es Bardhi el que se descuelga en la presión formando un 4-4-2. 

Apenas se habían colocado los jugadores en el campo cuando en un despiste de Postigo, Aritz Aduriz aprovechó para robarle la cartera en una jugada que terminó en penalti de Toño sobre De Marcos. El penalti lo transformó el Zorro para alegría de la hinchada rojiblanca. 

El Athletic celebrando el gol de Aduriz. | Foto: web Athletic club
El Athletic celebrando el gol de Aduriz. | Foto: web Athletic club

A partir de esta ventaja en el marcador el Athletic aprovechó para dominar con el balón. De Marcos con sus diagonales y sobre todo Susaeta con excepcionales movimientos por delante de la línea de balón moviéndose por todo el ancho del campo estaban dando el dominio al Athletic. Ambos extremos dividían atenciones por dentro para luego poder desbordar al Levante por fuera. Los de Muñiz no sabían cómo parar al Athletic y se desordenaban demasiado. Esto derivaba en que nunca podrían salir de forma limpia desde atrás perdiendo muchos balones en medio campo. 

Susaeta durante el partido frente al Levante. | Foto: web Athletic club
Susaeta durante el partido frente al Levante. | Foto: web Athletic club

Sin embargo y pese al claro dominio del Athletic había una grieta, la espalda de Lekue donde Morales conseguía recibir algún balón en largo que otro. Esto no solo daba algo de oxígeno al Levante si no que ponía en evidencia el mal posicionamiento defensivo en el área de los rojiblancos. Al no haber apenas jugadores granotas cargando el área esto no derivaba en peligro, pero la grieta estaba ahí. 

Muñiz lo vio rápido y en el minuto 35 realizó un cambio que le entregó el dominio totalmente a los suyos. Quitó a El Hacen, mediocentro defensivo, por Boateng, delantero centro, pasando a 4-4-2 real con Unal y Boateng como puntas. Esto le dio una salida en largo mucho más clara al Levante que superaba de esta forma la buena presión de los leones. Además los centros de morales tenían mucho más peligro ahora que el área contaba con un delantero más. Si a esto le sumamos que el Athletic estaba defendiendo mal el área, no les quedó otra a los rojiblancos que defenderse por acumulación. Reculó muchísimo el Athletic sumando muchos jugadores dentro de su propia área. El Levante se echó al ataque y dominó el partido consiguiendo rozar el empate en un remate a bocajarro de Boateng que paró con grandes reflejos Kepa

Pero tampoco todo era perfecto en el conjunto granota. Había muchos metros a la espalda de su defensa y De Marcos lo aprovechó para intentar cazar alguna contra. No tuvo tiempo de cazar ninguna, pero la grieta estaba ahí. 

Llegó el descanso y con él un nuevo movimiento de Muñiz, si el anterior había sido brillante este fue incluso mejor. Dio entrada a Ivi extremo izquierdo por Moore lateral derecho. Jason extremo izquierdo paso a jugar como lateral derecho aunque su función era únicamente ofensiva y Morales pasó a jugar como extremo derecho. Al colocar a dos jugadores ofensivos de tanto talento como Jason y Morales en el mismo lado Ziganda se vio obligado a colocar a De Marcos como extremo izquierdo para ayudar a Balenziaga. Aunque ni con estas pudieron contener al jugador más inspirado de los 22, Morales. De esta forma el Athletic se quedó sin la oportunidad de contragolpe. Si en los últimos diez minutos el Levante estaba dominando el partido ahora pasó a dejar al Athletic en la nada más absoluta. El Levante metía muchísimos jugadores en campo rival, robaba siempre arriba, obligaba a defender hasta a Aduriz y nunca tenía que correr hacia atrás. Si en la primera media hora el Levante apenas llegaba al 40% de posesión desde el minuto treinta hasta el minuto sesenta superó el 70% de posesión y el Athletic que en la primera media hora había conseguido disparar 8 veces apenas sumaba un disparo en la media hora siguiente. Tenía que mover ficha el Kuko.

WIlliams entrando por Aduriz. | Foto: web Athletic club
WIlliams entrando por Aduriz. | Foto: web Athletic club

El partido lo estaba pidiendo a gritos y el Kuko por fin se decidió a hacer su primer cambio. Corría el minuto 70 cuando metió a Iñaki Williams por Aduriz. Aritz estaba fundido y en los últimos minutos solo aportaba trabajo en defensa y tener una punta con la velocidad de Williams era algo necesario para intimidar al Levante, obligarle a correr hacia atrás y que no pueda pensar solamente en atacar. Pero ya era demasiado tarde. Un centro de Morales mal defendido en el área por el Athletic terminó entre rebotes en gol en propia de Aymeric Laporte. Empezaba un partido nuevo y quedaban apenas 20 minutos.

Ivi y Ünal celebrando el gol del empate. | Foto: web Athletic club
Ivi y Ünal celebrando el gol del empate. | Foto: web Athletic club

El partido se rompió del todo, ambos conjuntos necesitaban sumar de tres y no iban a conformarse. El gol podía caer para cualquiera de los dos lados y al final terminó cayendo a favor del Athletic. Mikel Rico incansable continuó una jugada en la que le habían hecho falta a Susaeta, abrió a la izquierda donde llegó De Marcos que centró al área y tras un mal despeje de postigo la pelota acabó en el fondo de las mallas. Se volvía a poner por delante el Athletic. A partir de ahí el Kuko cerró filas por la izquierda dando entrada a Saborit por De Marcos y el Levante dejó de atacar con tanta insistencia. En parte por el duro golpe anímico que supuso el 1-2 y en parte porque cada vez que lo hacían sufrían mucho las cabalgadas a la espalda de la defensa de Iñaki Williams. El Levante se había desfondado tanto física como anímicamente y no fue capaz de apretar en los minutos finales. Los tres puntos se irían para Bilbao alejando a los leones un poco más del descenso.