El Club Deportivo Lugo recibió el pasado domingo la visita de la Cultural y Deportiva Leonesa en el partido correspondiente a la decimoctava jornada liguera. Los gallegos llegaban con ganas de victoria tras el empate cosechado la semana anterior en Sevilla. Y con esas ganas saltaron al verde. Desde los primeros minutos el Lugo se mostró más seguro atrás y con una mayor organización en su juego. Tocaban y creaban. Así fueron llegando las ocasiones (y los goles) ante una Cultural que, según iba pasando el tiempo, se iba empequeñeciendo. Los leoneses, sin ideas, se vieron obligados a realizar un juego conservador, con mucho balón en campo propio y rápidas salidas a la contra, la mayor parte sin suerte ante Lugo muy sólido en defensa.

La pifia: algún que otro fallo de puntería y un regalo en el tercer gol

En un partido mágico en el Ángel Carro, la única pega posible al encuentro de los locales fue el marcador. El 3-1 no terminó de hacer justicia a lo visto sobre el césped, el Lugo dispuso de muchas y variadas ocasiones para hacer algún que otro gol más, como el tiro al palo de Vico o las dos ocasiones de Herrera. Pese a que materializaron las ocasiones, hay algunas como la de Azeez que si no llega a terminar en el gol de Barco sería para tirarse de los pelos. Sin ser una pifia en sí (con 3 goles en el marcador no se puede considerar tal) los albivermellos deben afinar puntería para los próximos encuentros ya que no siempre se dispone de tantas ocasiones.

Por otro lado, los leoneses sirvieron el tercer gol a los locales con una mala cesión de su defensa en el área en un ataque lucense, cazando el balón Iriome para chutar y, tras la el despeje de Palatsi, marcar Mario Barco y certificar su doblete.

El detalle: Mario Barco “on fire”

El ariete calahorrano demostró estar en un gran estado de forma. Fue un peligro constante para la defensa leonesa. Rompió, se movió, probó fortuna y generó mucho en ataque. A casa se lleva dos goles más que merecidos que confirman al riojano como ‘9’ de garantías en el equipo albivermello. Barco suma ya 4 goles en lo que va de Liga y se coloca máximo goleador del Lugo empatado con Iriome (que tras su tanto el domingo suma 4 también).

Los porteros: trabajo dispar

No tuvieron el mismo trabajo en absoluto. El meta local, Juan Carlos, apenas tuvo que intervenir en un par de ocasiones, haciéndolo con éxito en una de ellas y, tras un fallo defensivo, encajando el gol leonés en la otra. Un par de sustos y poco más. Aun así demostró buena colación y transmitió seguridad al equipo.

En la parte visitante, Jorge Palatsi tuvo trabajo durante todo el encuentro. El meta de la Cultural consiguió salvar a su equipo en la primera mitad, pero en la segunda el acoso del Lugo terminó por superarle. Fue el mejor de su equipo y realizó 5 paradas en todo el encuentro pero su desempeño de poco sirvió a los visitantes.

El partido en números

El Lugo dio mayor sensación de peligro durante todo el encuentro, pero la posesión la tuvo la Cultural Leonesa gracias a su juego poco arriesgado desde atrás (46% local por 54% visitante). Así pues los gallegos no necesitaron dominar el balón para generar peligro, con 19 remates (8 a puerta) por 9 de los leoneses (tan sólo 2 a puerta). Las ganas del Lugo también fueron palpables en cuanto a intensidad lo que provocó 22 faltas por 8 de los visitantes, que se vieron más vulnerables al juego local y en ocasiones pecaron de pasividad.