El mercado invernal está al caer. Los equipos ya han comenzado a moverse, y la Sociedad Deportiva Eibar no iba a ser menos.  Se puede palpar la incertidumbre de la afición, además de la ilusión, siempre presente por estas fechas. Con la Navidad llegan los regalos, y el Eibar se quiere brindar algún capricho, o quien sabe si, alguna que otra necesidad.  

El primer juguete en ser anunciado tiene nombre y apellido: Rubén Pardo. El jugador de la Real Sociedad ha sonado como posible sustituto del capitán, Dani García. Esa es otra. El de Zumarraga apunta a salir, pero es toda una incógnita el destino del mismo. En caso de salir, Pardo cogería las riendas de la medular armera. ¿Y si se queda? Ante esa situación, el del Rincón del Soto apuntalaría el centro del campo, generando mayor competencia y elevando el nivel de la plantilla.  

"Novias" no le faltan 

Rubén Pardo está muy solicitado. Son muchos los clubes que quieren hacerse con sus servicios. Málaga y Betis –entre otros- se han sumado a la puja, y no parece que estén por la labor de rendirse. Por el contrario, todo apunta a que le pondrán las cosas muy difíciles al Eibar para acabar llevándose al jugador. Es cierto que, el Betis puede contar con una cierta ventaja a la hora de contratarlo, al haberlo tenido en sus filas la pasada segunda vuelta. No obstante, la propuesta futbolística del Eibar es cuanto menos suculenta. Un conjunto con una idea clara de fútbol, y un entrenador con experiencia en la categoría.  

¿Encaja Pardo en el Eibar? 

Es más que cuestionable la compatibilidad entre equipo y jugador. Sobre todo, lo que más dudas genera es el sistema de Mendi. Un 4-4-2 que podría dejar a Pardo fuera de su hábitad natural. El riojano está acostumbrado a actuar como único pivote, por detrás de los interiores. Un sistema impensable para el Eibar, en estos momentos. Rubén podría adaptarse a él, pero como pivote en solitario lo hizo mucho mejor que acompañado.  

De todas formas, para eso está el entrenador. Debe ser el encargado de alinear el mejor once posible y de hacer cuadrar todas sus piezas a la perfección. Si Pardo acaba llegando al Eibar, está claro que, el equipo pegará un gran salto de calidad.