Hace seis años llegaba a Donosti uno de los jugadores que se consolidaría como uno de los más importantes de la última década para la institución txuri-urdin. Cedido por el Arsenal tras unas serie de irregularidades, Carlos Vela llegó a la Real Sociedad para hacerse de un nombre, el cual quedará grabado en la historia del club, ahora se viene un nuevo reto para el de Cancún, quien parte a la liga estadounidense para defender los colores de Los Ángeles FC, equipo que posee sus derechos desde el pasado mercado de verano y le incorporará a sus filas en el mes de enero. 

Vela se despidió de su afición el pasado miércoles en el partido contra el Sevilla, se fue por la puerta grande con un la última anotación del juego que ganó su equipo (3-1), luego pasó por las cámaras de Real Sociedad TV para despedirse personalmente y hablar sobre sus experiencias con la institución: "Decir adiós siempre es algo que queda marcado, la gente me recibió muy bien, empecé a ver cosas que no me habían pasado y no quiero dejar eso". Enunció tener muchas alegrías en su vida, especialmente a su hijo, su novia y sus amigos; afirmó que tomó una gran decisión al quedarse en San Sebastián. 

Le dedicó sus palabras a los aficionados: "Muchas gracias por todo, por estar en los buenos y malos momentos. Llevan un lugar en mi corazón. No será la última vez que nos veamos y espero que sigan disfrutando de la Real". 

Sobre su actuación en el último partido, muy nostálgico, manifestó que por muy soñado que fuera no esperaba que el final fuera tan bueno. Agradeció a las personas que se presentaron en el estadio para despedirle coreando su nombre. "Estoy muy emocionado, hubo muchos momentos buenos y malos, agradezco que el fútbol me de estos momentos y poder conocer tantas personas; es lo que me llevo, la gente se queda más con el Carlos Vela persona que con el jugador", concluyó el mexicano con una sonrisa, la última que dejaría plasmada en la rueda de prensa de Anoeta