El Real Madrid pierde El Clásico por tres goles a cero. En la primera parte, el equipo de Zidane dominó con el balón, y tuvo mayores ocasiones de gol que el rival; sin embargo, en la segunda parte, todo cambió, puesto que el Barcelona cogió el timón y golpeó al Madrid una y otra vez, hasta conseguir una distancia en la Liga que es letal y complicada de recuperar. 

Si Isco no juega, el Madrid tampoco lo hace 

Al igual que en el Barcelona con Messi, Isco es el único que muestra la actitud y la compresión del juego del Madrid para hacer jugar al equipo. El de Arroyo de la Miel es la clave en los partidos importantes, sin embargo Zidane quiso meter a Kovačić para marcar al 10 del Barcelona. Zidane se olvidó de ganar el partido, y a cambio quiso parar a un jugador. Incomprensiblemente, Isco tampoco jugó en la segunda parte. Todos sabemos la verticalidad que tiene este jugador y lo importante que es para la confianza del vestuario. 

Siguen los errores de precisión 

Un grave problema que tiene el Real Madrid es la imprecisión en los pases. Kroos, Marcelo, Carvajal y Kovačić han fallado más pases de lo habitual, en momentos donde el partido requería una buena actuación. Es la clave para tener un juego fluído y rápido, para sorprender al rival. Sin lugar a dudas, el Madrid debe mejorar mucho la concentración del equipo y el fondo físico. De lo contrario, los resultados no van a llegar. 

Bale hizo más que Benzema en menos minutos

La presente temporada del francés está siendo realmente mala. Benzema no marca, crea algunas ocasiones y participa poco en el juego del equipo. Todo el mundo sabe lo que es capaz de hacer, aunque en los partidos parece que no llegue a dar ni el 50 por ciento de lo que puede. El mercado de invierno está al llegar, y el Madrid debe atender a él para encontrar un buen recambio para el francés. Por otro lado, Bale tiene muestras de lucha, de garra; solo necesita confianza para volver al mejor nivel. 

¡Zidane, despierta!

Alguien tiene que explicar a Zizou que no se puede vivir de resultados, que en el fútbol la memoria tiene poco recorrido, y que hay que dar siempre el 100 por cien. Zidane parece no darse cuenta esta temporada de lo que tiene en el banquillo, le vemos algo lento con los cambios muchas veces, e incluso tiene decisiones controvertidas, como la de dejar a Isco en el banquillo. Está claro que el técnico francés es uno de los mejores de la historia del Madrid, en cuanto a títulos se refiere, pero debe mejorar en los aspectos tácticos y físicos del equipo.