Cuando hablas de defensas en el Atlético de Madrid se te pueden venir a la cabeza nombres como Arteche o Luiz Pereira, jugadores históricos en el club rojiblanco que serán recordados por su entrega, contundencia y calidad. Pero la actual generación de atléticos, que no ha podido disfrutar en directo de estos históricos defensores, podrá decir con la cabeza bien alta que vieron a un uruguayo que llevó el escudo del Atleti a lo más alto. Hablamos de Diego Godín, la definición de coraje y corazón en el campo.

El zaguero uruguayo de 31 años ha sido, desde la llegada del técnico que lo cambió todo en el club rojiblanco, Diego Pablo Simeone, de los centrales más valorados en el mundo del fútbol por su poderoso juego aéreo y por ser un muro prácticamente infranqueable para los delanteros, en la que ha formado pareja los últimos 6 años con jugadores como Miranda, Giménez, Savic y el canterano Lucas. Daba igual quien estuviese a su lado, que los arietes rivales iban a “sudar sangre” para llegar a portería. Y si encima estaba cubierta por cancerberos del calibre de Courtois o Oblak, hace entendible la opinión popular de que la defensa colchonera era la mejor defensa del mundo. Pero actualmente, el nivel de Diego Godín ha bajado (sobre todo el físico). Aun así sigue siendo el líder de la defensa y una pieza clave dentro del esquema rojiblanco. En definitiva, queda Godín para rato.

Bajón físico y en minutos

Ha sido un 2017 difícil para el uruguayo. A nivel colectivo vivió un final de temporada algo agridulce, donde se lograron los objetivos marcados por el club, pero vivieron una nueva eliminación europea a manos del Real Madrid. Pero ha sido durante el comienzo de esta temporada donde se ha llevado el palo más duro: la eliminación en fase de grupos de la Champions League. Como consolación, tocará jugar la Europa League (competición que conoce muy bien y que ha ganado con el club rojiblanco). Además, a nivel personal también le ha tocado vivir cambios. Siendo indiscutible durante toda su etapa como rojiblanco (es el jugador que más minutos ha jugado desde la llegada del Cholo), ha vivido más partidos en el banquillo que nunca.

La primera parte del 2017 seguía siendo indiscutible, pero como avisó Simeone en una rueda de prensa donde le preguntaban por las rotaciones: “Cada vez que tengo que dejar fuera a uno de los centrales, me duele el alma”. El nivel es muy alto en esta parcela. Hablamos de Savic, Giménez y un Lucas que ha tirado la puerta de la titularidad muchas veces durante esta temporada. Y esto lo ha sufrido Godín en sus carnes. Muchas rotaciones durante esta temporada, que han servido para que todos los defensas estén frescos.

Poderío aéreo, su arma infalible

Pero hay cosas que no cambian. Diego Godín sigue siendo la mayor referencia aérea del equipo en las dos áreas. Aunque su aportación goleadora ha bajado mucho (las jugadas a balón parado ya no son lo que eran en este equipo), suele ganar todas las disputas. O por lo menos no da facilidades al rival. Si que es verdad que ha tenido algún fallo importante en este aspecto, como el que tuvo el día contra Las Palmas esta temporada, pero sigue siendo un seguro de vida en esta faceta.

Otras de las armas que ha sacado a relucir durante este 2017 ha sido la salida de balón. Aunque el uruguayo nunca haya destacado en este aspecto (los pases en largo nunca han sido el fuerte del zaguero), se le ha visto últimamente con muchas ganas de subir con el balón jugado y romper líneas, sobre todo cuando el equipo más lo necesitaba, bien con paredes o conduciendo el balón. Ya lo demostró la temporada pasada en el partido contra el Eibar que se jugó en el Calderón. Se echó el equipo a la espalda cuando más difícil estaba el partido y se sacó una jugada en banda digna de los mejores extremos. Pasó el balón a Saúl y este marcó. 1-0 se ganó aquel partido.

Gol de Godín en el Camp Nou | VAVEL
Gol de Godín en el Camp Nou | Getty Images

Y de este estilo ha tenido varias Godín, que acabando o no en gol, ha demostrado ser un líder en el que confiar. Un capitán sin brazalete (o con él cuando Gabi no estaba en el campo). El uruguayo es clave en este equipo y, sin duda, lo seguirá siendo en 2018.