La trayectoria de Pau López en el primer equipo del RCD Espanyol ha sido un montaña rusa a lo que se refiere en rendimiento. A parte, la relación con el club y afición ha sido de amor-odio a lo largo de estos años. Llegados a 1 enero, el jugador es libre para poder negociar su contrato y el club está intentado seducirlo para que firme su renovación. 

Antecedentes deportivos

Es conocido por todos, que el joven meta sufrió una gran presión en la temporada 15/16 con Sergio González y Galca en el Banquillo. Aquel equipo luchó por la permanencia y el portero periquito encajó nada menos que 67 goles en 38 partidos.

La temporada pasada con la inversión de Chen se prometía tranquila, pero para Pau no fue así. La llegada de Quique Sánchez Flores fue determinante, ya que el entrenador madrileño apostó por Roberto Jiménez. La posible competencia ante el portero ex Olimpiakos no gustó a Pau y decidió salir cedido con opción a compra al Tottenham en busca de confianza. 

Su paso por tierras londinenses no fue productiva para él, ya que su participación se limitó a jugar en el equipo B del Tottenham y alguna convocatoria con el primer equipo. El equipo entrenado por Mauricio Pochettino no ejecutó la opción de compra y volvió este temporada a tierras catalanas. 

Esta temporada está siendo titular contra todo pronóstico, relegando a Diego López al banquillo. Aún así el portero Gerundense no ha sellado la renovación y todo parece indicar que en Junio abandonará la entidad.

Posibles causas de la no renovación 

La temporada 14/15 fue muy dura para el Pau, fue de los porteros más goleados y su autoestima seguro que se vio menguada. Galca llegó incluso a prescindir de él en detrimento del lituano Arlauskis

El fichaje de Roberto el año pasado hizo que hubiera un distanciamiento por parte del jugador ya que la presencia del jugador madrileño fue interpretada como una falta de confianza del cuerpo técnico. 

Los cantos de sirena de otros equipos de la liga como Betis, Málaga, Sevilla y Villarreal o el interés de Mauricio Pochettino en hacerse con sus servicios, hacen que la renovación de Pau López sea una quimera para la dirección deportiva. 

Veremos a lo largo de los días que sucede con el joven portero. Jordi Lardín afirmó que si no renovaba antes de Enero iría al banquillo aunque posteriormente se desdijo de esta afirmación.