El 6 de enero de 2018 seguro que quedará grabado en el recuerdo de Ángel Correa, un regalo de Reyes. El jugador del Atlético de Madrid arrancó el año marcando para el equipo rojiblanco. Su gol en el minuto 10 del partido ha significado muchas cosas: el primer gol del Atlético en Liga en 2018, el primero del año en el Metropolitano, el primero en el debut de Costa…uno más del argentino para la historia del club madrileño.

Durante todo el encuentro y en la celebración del gol, al internacional argentino se le vio muy contento y feliz. Algo que se encargó de afirmar tras el pitido final: “Contento con el trabajo que vengo haciendo, intento aprovechar la ocasión que me da el entrenador”.

Tampoco se olvidó de las nuevas incorporaciones, mostrando su felicidad: “También feliz por la llegada de dos nuevos compañeros como Costa y Vitolo, porque nos van a ayudar mucho”, aseguró.

En todo enfrentamiento de fútbol la tensión existe. Hoy, durante unos minutos, el protagonismo lo ocupó esa tensión, de la que el delantero dijo que “se quedó en el campo” y volvió a repetir que todo el equipo está muy feliz por haberse llevado los tres puntos.

Tras marcar el segundo gol de la mañana, Diego Costa lo celebró con la grada. Un gesto que le costó la segunda amarilla y, por ende, la roja y su expulsión. Muchos no sabían que esa acción conllevaba tal consecuencia. Correa admitió no saberlo y se mostró apenado por no poder contar con la ayuda del brasileño en el siguiente partido.

Más allá del gol, el resto del partido del de Rosario ha sido bueno. Aunque durante los primeros minutos estuvo algo torpe lo solucionó rápido con el gol. Muy trabajador en la zona defensiva e inició la jugada del 2-0.