El pasado mes de mayo, Cezary Wilk fue operado de la rodilla. Una rodilla que desde su llegada en 2015 al equipo no ha dejado de mantenerle alejado de los terrenos de juego durante largos periodos de tiempo.

Tras finalizar su recuperación, el polaco está ya a la entera disposición de Natxo. Durante el parón navideño, el Real Zaragoza publicó un comunicado mediante el cual se respaldaba al entrenador y se manifestaba la intención de no fichar durante el mercado invernal debido principalmente a la mala situación económica del club.

Por lo tanto, el Real Zaragoza solo tiene una posibilidad de reforzarse de cara al final de temporada. Wilk es la única opción, a priori, de que un nuevo jugador forme parte del equipo. Así pues, aunque no hay nada oficial, todo hace indicar a que el Real Zaragoza ha dejado en las manos del jugador la decisión de retirarse o continuar con su carrera en el club blanquillo. Cerca de cumplir los 32 años y tras el sufrimiento que ha pasado por sus problemas con las lesiones.

Por su parte, el club ha puesto todo lo necesario para que el jugador continúe. Además, su incorporación no supondría un coste extra para el club, pues el futbolista ya renovó la pasada temporada acordando cobrar el salario mínimo para un jugador de Segunda División.

A falta de dar de alta la ficha, Wilk sigue entrenándose con sus compañeros al mismo ritmo. Reforzar el centro del campo puede ser muy positivo para los objetivos del club. Aunque no ha tenido suerte y no ha podido disputar muchos minutos, Wilk fue un jugador importante al principio de 2015 y rindió a un buen nivel. Todo hace indicar que en los próximos días se resolverá su situación, pero de momento, ya aparece en la página del club con el dorsal 12.