A la cuarta fue la vencida. El Lugo resolvió satisfactoriamente su visita al Reus y volvió a la senda victoriosa tras encajar tres dolorosas derrotas que lo alejaron de los puestos de Playoffs. No fue un partido sencillo, el cuadro anfitrión peleó hasta el final y pudo igualar por medio de Mayordomo, pero el destino no fue caprichoso con la escuadra rojiblanca esta vez. Herrera anotó de cabeza el único tanto del partido en el minuto 14, insuficiente para las ocasiones con las que contó el conjunto dirigido por Francisco, desacertado de cara a puerta una vez más. Pita volvió al once ante la baja de Iriome, y Azeez comandó al equipo desde la medular. La parte mala se la llevó Luis Ruiz, nueva baja del Lugo, una más.

Primer asalto

En los primeros compases del envite no hubo dominio por parte de ninguno de los dos conjuntos. El Lugo se adelantó temprano por medio de Herrera, que cabeceó en el área chica un buen centro de Luis Ruiz desde la izquierda y sorprendió a Badía. El cuadro catalán trató de responder con sendos intentos de Mayordomo y de Víctor Silva que no inquietaron a Juan Carlos, muy seguro durante todo el primer acto. La posesión estuvo igualada, pero las transiciones del cuadro rojiblanco fueron mucho más certeras que las de su rival. Un córner botado por Vico en el 39 encontró la cabeza de Josete, que envió el balón ligeramente desviado a la derecha de la meta del cuadro local. El Lugo contó con la última de la primera mitad en las botas de Vico previa jugada individual de Barco, que ganó línea de fondo y asistió a su compañero en el segundo palo.

Dulce y sufrido desenlace

Tras la reanudación, nuevo intento del Lugo. Bernardo cazó otro saque de esquina y mandó el balón por encima del larguero. Luis Ruiz se marchó lesionado en el minuto 52 por lo que Francisco dio entrada a Kravets, nuevo varapalo para el técnico almeriense. En el minuto 60, Ais Reig expulsó al preparador local, López Garay, por protestar una entrada de Carlos Pita, el que ya tenía cartulina amarilla y se jugó la expulsión en esa acción.

Doble sustitución del cuadro local en el minuto 68 para cambiar de sistema y pelear por el empate. El Lugo se aprovechó de los espacios generados por el cuadro anfitrión y pudo ampliar su renta con una jugada de combinación entre Albarracín y Kravtes, que cedió para el uruguayo, el que erró en la definición ante la rápida reacción de la zaga local. El Reus no contó con acercamientos claros, pero sí avisó al cuadro gallego con repetidos intentos que no tomaron buena dirección. Primero, Lekic se revolvió en la frontal y golpeó cruzado ante la atenta mirada de Juan Carlos. Tan solo dos minutos después, Yoda golpeó duro desde el lado derecho y obligó al meta del cuadro albivermello a estirarse para desbaratar la acción.

El árbitro añadió cuatro minutos en los que pudo pasar de todo. Escriche contó con dos claras ocasiones en los pocos minutos que disputó, entre ambas, Mayor pudo igualar para los locales, pero la fortuna esta vez sí se alió con el Lugo y los tres puntos se volvieron de camino a la ciudad amurallada.

Partido tosco

El choque se decidió por la mínima, con un tempranero tanto de Herrera que hizo justicia. Fueron 25 las faltas señaladas por el colegiado, las que trabaron el partido en ciertos tramos. Las 16 infracciones cometidas por el Lugo contrastan con las 9 señaladas al cuadro local. Partido intenso y bronco en el que ambos equipos jugaron sus cartas.

Abierto hasta el final

El Lugo no logró matar el partido, la emoción se mantuvo hasta el último suspiro. En esta ocasión, la suerte acompañó y no hubo lamentos, pero sí una clara lección: mejor prevenir que curar. Mayordomo silenció el Municipal en el 92 y pudo firmar el empate. El cuadro de Francisco pudo pagar pero acabó cobrando, aunque como ya se vio jornadas atrás, no siempre se repite la película.