Las prestaciones del Sporting han mejorado desde la llegada de Rubén Baraja a Gijón. Desde que el técnico vallisoletano se sienta en el banquillo de El Molinón, el Sporting ha logrado sumar nueve puntos de doce posibles, una dinámica bastante positiva que le ha permitido acercarse de nuevo a los puestos de playoff. Sin embargo, el juego del equipo aún sigue creando dudas entre los aficionados, que creen que la plantilla todavía puede dar más de sí. Pero, ¿y si no fuese así?

El pasado verano se confeccionó un grupo de jugadores en el que se tenían depositadas grandes esperanzas para devolver al club a Primera División. Un total de doce jugadores llegaron para completar la plantilla, desmantelada tras el descenso a la liga de plata. A pesar de la ilusión inicial, la práctica futbolística no ha cumplido las expectativas, lo que ha atraído el recelo sobre la planificación deportiva del pasado mercado estival. Varios jugadores no han rendido al nivel que de ellos se esperaba, agravándose la situación cuando el conjunto más ha necesitado contar con sus servicios.

Stefan Scepovic, de estrella a estrellado // Imagen: Diego Blanco - VAVEL
Stefan Scepovic, de estrella a estrellado // Imagen: Diego Blanco - VAVEL

Las carencias son evidentes en ciertas líneas y el equipo necesita refuerzos con los que mejorar esas posiciones. Actualmente, los puestos más vulnerables son el eje de la zaga, el lateral derecho, el centro del campo y la delantera. Casi nada... En la dirección deportiva son conscientes de la imperiosa necesidad que aflora en el club, y Miguel Torrecilla ya ha puesto en funcionamiento su maquinaria para erradicar el problema. Ahora bien, hay dos caminos para encontrar la solución: confiar en las perlas de Mareo o buscar carne fresca en el mercado de fichajes. ¿Cantera o cartera? ¿Cuál es la acertada?

¿Y si la solución estuviese en casa? (Fer Rodríguez Martínez - @Fer_Pocahontas)

Fuera venda. No es menos cierto que, a pesar de la versión mejorada que los parroquianos de El Molinón pudieron ver el pasado sábado ante el Alcorcón y de los triunfos cosechados en las últimas fechas, el actual Sporting deja bastante que desear, tanto a nivel de juego como de resultados. La zaga no es tan sólida como parecía al inicio del curso, el centro del campo, sin un organizador puro, brilla más por su carácter y por su brega que por la circulación del cuero y la delantera, ¡qué decir de la delantera! A excepción del omnipresente Michael Santos, ha sido un auténtico vaivén. Un día jugaba uno y al día siguiente el otro. No había un plan definido. No había un guión a seguir. Al menos hasta la llegada de Baraja, que, para bien o para mal, decidió apostar por la dupla Castro-Santos. Aunque por el momento esté dando buen resultado, aún es pronto para lanzar las campanas al vuelo.

Ante tantas y tan graves carencias, y con la llegada del mercado invernal, muchos aficionados pusieron el grito en el cielo reclamando más fichajes. ¿No ha sido suficiente con el fiasco del pasado curso? ¡No hay manera de aprender la lección! Un extremo puro (solucionado con la vuelta de Jony en forma de cesión hasta final de temporada), un centrocampista de perfil creativo (ante el rotundo fracaso que supuso el fichaje de un Álex López desaparecido en combate y sin expectativas de regreso a corto plazo), un delantero centro (pues Borja Viguera y Stefan Scepovic parecen condenados al ostracismo), un defensa central e incluso un lateral derecho (fruto de la incomparecencia de Lora en los últimos meses de competición) eran las principales peticiones de la grada. Un completo.

Alberto Lora no atraviesa por su mejor momento // Imagen: Diego Blanco - VAVEL
Alberto Lora no atraviesa por su mejor momento // Imagen: Diego Blanco - VAVEL

"¿Y si la llave del éxito se encuentra a solo unos metros de la Casina de Cristal?"

Frente a tal despropósito, es momento de echar la vista atrás y rememorar como se fraguó el último ascenso, el de la campaña 2014/15, el del Pitu y los guajes, el de aquel Sporting que hizo feliz a todo Gijón y del que muchos se sienten aún nostálgicos hoy en día. La grave situación económica que atravesaba la entidad por aquel entonces obligó a apostar por los jóvenes talentos que brillaban en el filial. ¿Y si se repite la operación? ¿Y si la llave del éxito se encuentra a solo unos metros de la Casina de Cristal, entrenando cada día en Mareo?

Dani Martín es el futuro del Sporting bajo palos // Imagen:Diego Blanco // VAVEL
Dani Martín es el futuro meta rojiblanco // Imagen:Diego Blanco // VAVEL

No se pretende decir, ni mucho menos, que los fichajes no sean necesarios para apuntalar el equipo, sino más bien que hay una buena base de jugadores jóvenes que se merecen, al menos, la oportunidad de dar el salto, la oportunidad de crecer y convertirse en la base de un Sporting exitoso. Dejar de lado la gran temporada que está cuajando el filial rojiblanco, actual líder del grupo II en Segunda División B, sería un error fatal.

Dani Martín bajo palos, Víctor Ruiz en el eje de la zaga, Adrián Montoro por el carril diestro, Nacho Méndez y Cristian Salvador como lanza y escudo en el centro del campo, Cayarga y Pedro Díaz aportando su picaresca habitual, como si jugasen en el patio del colegio, y Claudio para el gol. ¿Para qué más? Si en tu cara no se dibuja una sonrisilla al leer estos nombres, mala señal. Como ya ocurriese en aquel maravilloso 2015, la solución está en casa. Hay talento y solo hace falta valor para apostar por él. ¿Lo tendrá el Pipo? Ese es ya otro cantar…

¿La solución? Fuera de casa (Jorge García Cuesta - @xurde_97)

La vuelta de Jony ha abierto la veda en el Sporting. El extremo cangués ha sido el primer fichaje del conjunto rojiblanco en este mercado invernal, un aterrizaje que, se estima, no será el único. El equipo dirigido por Rubén Baraja necesita reforzar varias posiciones afectadas por la ineficacia de ciertos integrantes de la plantilla, que no han aportado todo lo que se esperaba de ellos. Además, hay que sumar las inesperadas lesiones que están lastrando al cuadro gijonés. Con la segunda vuelta ya en juego, el Sporting necesita un "plus" que acabe con las carencias que ha demostrado desde que empezara la competición el pasado mes de agosto.

Arranca la segunda etapa de Jony como rojiblanco // Imagen: Diego Blanco - VAVEL
Arranca la segunda etapa de Jony como rojiblanco // Imagen: Diego Blanco - VAVEL

La buena temporada que está desarrollando el filial no ha pasado desapercibida para la parroquia rojiblanca, que ve en los jóvenes jugadores del filial una posibilidad de acabar con la falta de alternativas que acusa el primer equipo. Sin embargo, la dirección deportiva no parece estar del todo convencida con depositar la responsabilidad del ascenso en manos de las promesas que emergen desde las categorías inferiores. La solución que actualmente necesita el Sporting no pasa por ahí.

En plena dinámica ascendente desde el relevo en el banquillo, con el equipo cada vez más cerca de las posiciones de promoción de ascenso, el conjunto asturiano no se puede permitir arriesgar con el talento de los que vienen de abajo. Aunque aparentemente pueda parecer el remedio que acabe con el calvario, como sucediese en la temporada del ascenso con Abelardo, la situación actual no se corresponde con el momento que vivía el equipo por aquel entonces. Cabe recordar que el objetivo de aquel grupo no era la vuelta a la élite, sino una permanencia que, sorprendentemente, se vio superada por una meta con cotas más altas. En este curso, el ascenso sí es prioritario.

"La oportunidad para los jóvenes llegará, pero progresivamente y no como refuerzos de lujo en pleno desarrollo del curso"

En definitiva, el Sporting requiere experiencia, fichajes que acaben con la agonía a través de su manejo en el fútbol profesional, unas características ausentes en el segundo equipo rojiblanco. La oportunidad para los jóvenes llegará, pero progresivamente y no como refuerzos de lujo en pleno desarrollo del curso. El conjunto gijonés siempre ha destacado por su apuesta por la cantera, lo que confirma el futuro que les depara a las promesas sportinguistas dentro de la entidad asturiana.

Por tanto, la respuesta a todas estas carencias se encuentra en encontrar revulsivos fuera del club. Con el mercado invernal, se ha abierto un mundo de posibilidades para el equipo, que suspira por fulminar las dudas que han surgido en su entorno y centrarse únicamente en lo que verdaderamente goza de relevancia: el ascenso. Es momento de enmendar los errores de la planificación veraniega y aprender, para confeccionar así una plantilla competitiva que sacuda el letargo vivido en los últimos meses. Es el momento de actuar, y la dirección deportiva debe de coger "el toro por los cuernos".

En las últimas semanas, se ha hablado mucho del sondeo que está llevando a cabo el director deportivo, Miguel Torrecilla, en varias ligas extranjeras. Las opciones son diversas, aunque la mejor decisión sería pujar en el mercado nacional, y, dentro de él, por los jugadores que sepan de primera mano la dificultad que supone aspirar al ascenso en la liga más igualada del mundo. Teniendo en cuenta el periodo en el que se encuentra la competición, con media temporada ya disputada, los errores con los fichajes pueden pesar demasiado, lo que a la postre puede significar el fracaso más absoluto. La vuelta de jugadores que dieron un gran rendimiento en el pasado, como es el caso de Jony, parece ser la mejor elección, aunque habrá que esperar para saber el futuro que le deparará al conjunto asturiano.

El Sporting se encuentra en manos de Torrecilla // Imagen: Diego Blanco - VAVEL
El Sporting se encuentra en manos de Torrecilla // Imagen: Diego Blanco - VAVEL