Paulo Henrique Chagas de Lima, gran promesa proveniente de la liga brasileña. Todo el mundo hablaba de él, su calidad desbordante, su parsimonia dentro del verde, su visión de juego…  la mezcla de todos estos factores hacían que el mediapunta fuera una gran apuesta por parte de la entidad sevillista.

“Ganso” aterrizo en la capital andaluza en el año 2016, temporada en la que Sampaoli se encontraba como técnico de las filas rojiblancas. El entrenador argentino decidió darle minutos dentro del terreno de juego, brindándole más de una ocasión para mostrar su tan ansiado juego.

Con la marcha de Sampaoli y la llegada de Berizzo su suerte cambió a peor. El nuevo míster argentino no puso mucha confianza en él, dándole la oportunidad de terminar el año con un balance de tan solo 16 partidos disputados.

Una vez comenzada la temporada 2017/2018 y con una nueva salida dentro de la zona técnica, el brasileño, volvió a quedarse en el banquillo de forma casi indefinida. Después de la llegada a Sevilla de Montella, el nuevo director de orquesta, el ex del São Paulo tan solo ha gozado de minutos en ocho partidos de Liga y tan solo en uno de Champions, con un cómputo de tres goles.

El brasileño tocado y hundido, sin poderle quitar la plaza al titularísimo Franco Vázquez, poco a poco va poniendo sus pies fuera del conjunto hispalense. “Ganso”, desesperado, tan solo busca a día de hoy rescindir su contrato y marcharse cuanto antes.

En estos momentos hay dos equipos interesados en el juego de este mediapunta, el São Paulo, de donde procedía antes de venir al Sevilla, y el Spartak de Moscú, que podría aprovecharse de que el mercado en Rusia se acaba el próximo 24 de febrero.

Los de Massimo Carrera están buscando un jugador con sus mismas características y puede que consigan llevárselo, dejando una plaza libre dentro de la entidad rojiblanca.