El Lorca Deportiva lo vuelve a hacer

Volvió la versión visitante del Lorca Deportiva que sorprendió a otro equipo de la zona alta de la clasificación en su propia casa cortocircuitando los jugadores melillenses y sabiendo gestionar como nadie los tiempos y sus oportunidades.

La primera parte fue un partido muy espeso, casi sin oportunidades por ninguno de los dos equipos. El Melilla lo intentaba con un ritmo cadencioso que favorecía las acciones defensivas del equipo de Mario Simón, hoy, otra vez, muy serio. En ataque los lorquinistas sin renunciar a la posesión de la pelota, buscaban con insistencia la jugada arriba para que Juan Arcas luchara con los centrales azulinos, aunque en pocas ocasiones salió vencedor del envite y las únicas aproximaciones serias de los lorquinos fueron a balón parado y disparos lejanos de David Álvarez o Britos que salieron muy altos.

Poco más ofreció el Melilla sobre el que recaía la responsabilidad de llevar el peso del partido. Un par de remates tras córner que detuvo bien Simón, fue el escaso bagaje de los de Manolo Herrero en los primeros 45 minutos.

Segunda parte rota

En la segunda el equipo local salió con la decisión de meter una marcha más. Pero a su vez dejaba atrás los espacios que el Lorca Deportiva esperaba. En el minuto 57 Juan Arcas conseguía llegar en velocidad desde la banda y forzaba un córner. El saque de Javi Saura se iba pasado pero en el área pasaba algo de lo que los árbitros no suelen ver pero que en esta ocasión si vio y señalo penalti favorable al Lorca. El propio Juan Arcas engañaba a Tanis adelantando a los visitantes en el marcador.

Mario Simón supo ver bien esa oportunidad que le concedía el rival y sacó a Pedro Montero para aprovechar su velocidad a la espalda

A partir de ese momento se abrió otro partido. Los nervios y la precipitación se apoderaron del equipo local que apenas inquietó a Simón y los espacios atrás eran cada vez más evidentes. Mario Simón supo ver bien esa oportunidad que le concedía el rival y sacó a Pedro Montero para aprovechar su velocidad a la espalda de los defensas y cuando ya el partido llegaba a su fin Pedro cogió “su moto”, llegó hasta el área melillense y centró para que Britos que llegaba al otro palo consiguiera el 0-2.

Aunque el gol “mataba” el partido, en el 94 Yacine a la salida de un corner recortaba distancias aunque ya no daba tiempo para más. Victoria fundamental para los lorquinos en su lucha desesperada por conseguir la permanencia y frenazo a las aspiraciones de play-off de los melillense.

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