El Málaga no termina de arrancar. El equipo de José González tiene unas sensaciones mucho más positivas con respecto al equipo que dirigió Míchel en la primera vuelta, sobre todo defensivamente, pero los resultados se hacen de rogar. Hasta ahora, se ha puesto el foco sobre los escasos diecisiete goles a favor. La falta de gol es un hecho, pero quizás los motivos sean otros. Ya lejos de entrar en temas extradeportivos como fichajes o planificación, lo cierto es que el juego del equipo blanquiazul deja mucho que desear.

Y es que la falta de gol del equipo costasoleño puede venir propiciada por el escaso juego que han propuesto tanto Míchel, como José González. De hecho, de los diecisiete goles anotados, solo siete han sido a juego corrido. Los diez restantes se produjeron a balón parado, ya sea de falta, saque de banda o penalti. Quizás el no tener un mediocentro organizador provoca este estilo de juego tan defensivo.

En los siete goles anotados a juego corrido destacan dos nombres propios: Rolan y Chory Castro. Rolan ha conseguido tres goles de esta forma, dos en el empate ante el Athletic (próximo rival del Málaga)  en la jornada seis y otro en la polémica derrota ante el Real Madrid (jornada trece). Por su parte, el Chory marcó contra el Deportivo (jornada doce) y, al igual que Rolan, ante el Real Madrid. Entre ambos han sumado cinco de los siete goles. Borja Bastón, también contra el Deportivo, y En Nesyri, contra el Eibar en la jornada veinte, son los otros dos anotadores a juego corrido.

Es muy probable que el equipo de José González no cambie su estilo de juego a estas alturas de la temporada, pero lo que está claro es que jugadores como Rolan y Chory Castro, sumados a la llegada de otros como Ideye, serán claves de cara a portería en esta recta final de Liga.