Unai Bustinza fue el jugador que compareció en la entrevista justo después del partido a pie de campo. El jugador formó pareja de centrales junto a Siovas y, a pesar, del titubeante comienzo del equipo pepinero en defensa fue uno de los mejores de su equipo.

Aún en caliente comentó su sensación de lo que iba a ser el campo del Athletic Club: "Ya sabemos lo que es San Mamés, los inicios son muy duros”  y  explicaba lo que había sucedido: “nos ha pillado con poca contundencia, nos han sacado centros fáciles y, al final, tienen jugadores que por arriba son muy buenos y eficaces y lo han demostrado".

Bustinza sabía lo que se iba a encontrar ya que él jugó durante dos años en el primer equipo del club vasco. Tras la marcha de Iraola jugó bastante de lateral, a pesar de haber sido central en las categorías inferiores, posición a la que ha vuelto esta temporada a las órdenes de Garitano.

El Leganés después mejoró y tuvo ocasiones para empatar: "El resultado ha sido 2-0, pero ha habido ocasiones para los dos lados, podía haber sido un partido de más goles y más igualado en el resultado”, la explicación era sencilla: “ellos han sido más eficaces y han competido mejor el partido".

Con el partido del próximo domingo en Butarque ante el Sevilla en mente, acababa Bustinza: "Los partidos en casa son muy importantes, fuera nos está costando bastante. Hoy queríamos darle la vuelta y no ha podido ser. Ahora tenemos que volver a Butarque y ahí en casa volver a ser fuertes".

El vizcaíno, criado en la cantera del Athletic Club, volvió a casa como capitán del Leganés debido a que sobre el terreno de juego no estaban Szymanowski, Mantovani ni Gabriel Pires. Así, en tres temporadas, Bustinza se ha convertido en un jugador clave en el vestuario y prueba de ello es que sus compañeros le eligieron como capitán en el día de ayer.

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