El Juvenil A del FC Barcelona estará en las semifinales de la UEFA Youth League. Ante un Mini Estadi que presentó una de las mejores entrada de la temporada, los jugadores de Francisco Pimienta realizaron un buen encuentro donde pudieron imponerse a su rival, el tampién español Atlético de Madrid.
El conjunto visitante también gozó de ocasiones para sumar algún gol en el marcador pero la defensa del conjunto azulgrana, que se volvió a mostrar muy sólida, o la falta de puntería desbarataron las ocasiones visitantes.
El aficionado azulgrana disfrutó de su juvenil que está realizando una temporada para el recuerdo y jugadores del filial como Jorge Cuenca o Alberto Varo tampoco quisieron perderse en el encuentro. La próxima parada, la sabremos próximamente.
Una primera parte disputada
El conjunto local saltó al terreno de juego con un claro 4-3-3 y tan solo dos cambios respecto al último partido europeo que jugaron, hace tres semanas, en París. Por su parte, el Atlético de Madrid presentó hasta cuatro cambios en sus filas y, después de realizar una foto conjunta ambos equipos para apoyar el respeto en Europa, empezó el partido.
Ya de entrada se vio cuál sería la dinámica del partido: un FC Barcelona que buscaría tener el balón y, además, realizaría una presión alta a un Atlético de Madrid que, aunque no renunciaría a salir con el balón jugado desde atrás, también buscaría la velocidad de Clemente o Salomón en la punta de ataque. Y así fue.
Durante los primeros minutos, las ocasiones se repartieron entre ambos conjuntos. Primero fue Miranda que, en el minuto uno, centró pero Dos Santos despejó bien de puños y, casi en la jugada siguiente, el visitante Carlos Isaac condujo un balón por la banda pero su centro se marchó por encima de la portería de Peña.
A pesar de la presión alta local, el Atlético parecía encontrarse cómodo sobre el terreno de juego. Entonces llegó la primera ocasión clara para ambos conjuntos. Primero fue Collado que, para los locales, centró un córner pero cuando Miranda estaba a punto de rematar Brandariz se avanzó a su compañero y no consiguió impactar bien el esférico.
Aun así, los visitantes respondieron en dos ocasiones: primero fue Moya, con un chute que atrapó Peña y, seguidamente, con un Carlos Isaac que no paraba de intentarlo por la banda derecha.
A partir del cuarto de hora de partido, las ocasiones se decantaron para el lado local y más cuando, en el minuto 25, llegó el primer gol azulgrana.
Después de una buena jugada colectiva, Marques Méndez, que no jugó de titular ante el PSG en los octavos de final, consiguió controlar un centro local y, después de encarar portería, consiguió definir raso al palo largo de Dos Santos. El Mini enloqueció y es que, tras 25 minutos, el FC Barcelona estaba más cerca de las semifinales.
Los azulgranas lo siguieron intentando y, en el minuto 30, después de una gran jugada trazada por Abel Ruiz, Ricard Puig y Collado, Carles Pérez recibió un balón que chutó pero, al estar muy escorado, el esférico se marchó por encima de la portería de Dos Santos. Aun así, el Atlético no bajó los brazos.
Los de Cano Martín, que decidieron realizar una presión alta, pusieron en más de un apuro la salida del balón azulgrana y primero Muñoz, con un chute que se marchó desviado, y luego Agüero de falta directa, que tampoco vio portería, mantenían vivas las esperanzas del conjunto visitante.
Pero en el minuto 42, el FC Barcelona consiguió aumentar su ventaja en el marcador. Después de un mal despeje de Dos Santos, Miranda robaba el balón y, después de una jugada individual por banda izquierda, asistía a Collado que chutaba y, tras impactar con un defensa, su disparo se colaba en la portería visitante.
Cano Martín animaba a los suyos diciendo, literalmente, que con un gol se metían en el partido pero, a falta de tres minutos para finalizar el primer tiempo, el gol local fue más que psicológico. Dos minutos más tarde, el árbitro decidió poner fin al primer tiempo.
Un segundo tiempo con color azulgrana
La segunda mitad empezó con un FC Barcelona que, a pesar del resultado, continuaba buscando el gol. Primero fueron Carles Pérez, Ricard Puig y Collado los que hicieron enloquecer al Mini con una jugada que el último no consiguió finalizar y, un minuto más tarde, Abel Ruíz lo siguió intentando pero su disparo rebotó con la un defensa. Mientras tanto, el Mini Estadi seguía disfrutando.
El Atlético de Madrid seguía sin rendirse, buscando nuevamente la velocidad de us jugadores más avanzados pero, en todo momento, la defensa azulgrana consiguió alejar el peligro visitante. En el minuto 54, el visitante Toni Moya puso un balón peligroso en el área local pero la defensa local despejó el balón.
La respuesta azulgrana fuen inmediata y, después de una buena jugada individual, Carles Pérez provó fortuna pero su disparo impactó con un defensa colchonero.
Tan solo cinco minutos más tarde, Marques Mendez gozó de una de las ocasiones más claras del partido. Después de que Dos Santos despejara un buen disparo de Carles Pérez, el ya goleador del encuentro se encontró solo ante la portería pero, incomprensiblemente, su disparó se marchó rozando el palo de la portería visitante. Eso sí, ante el fallo del azulgrana, el Mini Estadi respondió con una gran ovación hacia el jugador español.
El dominio local estaba siendo absoluto y, en el minuto 65, Alex Collado gozó de otra clara ocasión. Esta vez fue en un chute de falta directa que aunque fue potente y bien colocado, Dos Santos despejó en una gran intervención del meta visitante.
Y cuando más estaban disfrutando los locales en el terreno de juego, Brandariz tuvo que ser sustituido después de lesionarse. Comas entró en su lugar y, con seguridad, la lesión del central fue la noticia más negativa del encuentro del martes por la tarde.
Aun así, el Atlético también gozó de una gran oportunidad tras una buena jugada invididual de Riquelme, que había entrado pocos minutos antes, pero que al chutar se encontró con una gran estirada de Ignacio Peña que, a mano cambiada, realizó la mejor parada del encuentro.
En la jugada siguiente, el Atlético de Madrid consiguió introducir el balón en la portería de Peña pero en el salto anterior al gol el portero local sufrió una falta y, consiguientemente, el gol no subió al marcador.
En los últimos minutos, la dinámica no cambió. La ocasión más clara fue para Marquez Mendes, que fue uno de los azulgranas más activos y que su chute se marchó muy cerca de la escuadra de la portería de Dos Santos. Después de añadir cuatro minutos, Robert Madley pitó el final del encuentro.
El Mini Estadi lo celebró efusivamente y aunque el dominio del partido fue totalmente azulgrana, el FC Barcelona se confirmó como uno de los cuatro mejores equipos de Europa. ¿El rival en semifinales? El Manchester City o el Liverpool. El miércoles se confirmará.