El club blanquivioleta se encuentra en una encrucijada. Tienen a tres puntos los puestos de playoff, pero al equipo le cuesta nivelar la balanza entorno a la defensa y ataque. La cuestión es si se debería destituir a Luis César Sampedro e intentar revertir la situación y mantener las aspiraciones al playoff o seguir con él y estar igual.

Situación insostenible (Iván Herrero - @Iv4_H3rrero)

Luis César tiene que dejar de ser el técnico del Real Valladolid. Su situación tanto en el terreno deportivo como en lo extradeportivo es insostenible y un club como el vallisoletano no se lo puede permitir, ya que necesita el ascenso como el respirar.

En uno de los peores momentos de la historia del conjunto blanquivioleta, cuatro temporadas seguidas en Segunda División situación que no ocurría desde la década de los 70 (temporada 1971/72 hasta la 1979/80), los dirigentes tienen que tomar decisiones drásticas para cambiar el rumbo, y destituir al entrenador gallego debe ser la primera.

Luis César en el partido contra el Rayo | LaLiga 1|2|3
Luis César en el partido contra el Rayo | LaLiga 1|2|3

El técnico llegó en verano del año pasado y por lo que se vio en la pretemporada, el Valladolid prometía bastante. No perdió ninguno de los partidos con un bagaje de siete victorias y cuatro empates en sus once partidos, con enfrentamientos ante equipos de altos vuelos como el Athletic, el Besiktas o el Real Betis.

Pero todas esas buenas expectativas iban a desaparecer con la primera jornada de LaLiga 1|2|3, el Barça B se llevó los primeros tres puntos del José Zorrilla (1-2) en un choque dónde los albivioletas reaccionaron en la segunda mitad, pero se veía la fragilidad defensiva que lleva sufriendo hasta el día de hoy. En el empate en León (4-4) ya se veía algo que no encajaba, el equipo era goleador, con Jaime Mata como referencia ante la salida de José, pero recibía goles con facilidad.

Este ha sido uno de los puntos claves del continuo juicio sobre el entrenador, la incapacidad de solucionar el problema de la cantidad de goles encajados. Estuvo obsesionado con la pareja de centrales Deivid - Olivas mientras que Calero estaba tirando la puerta de la titularidad a patas, Ahora mismo, el Real Valladolid es el quinto equipo más goleado de la competición, sólo superado por los clubes que se encuentran en el descenso a Segunda División. 

"Si Mata no tuviera los números de este año, Luis César habría estado en la calle hace tiempo"

Otro aspecto negativo a resaltar: Luis César no sabe vivir sin el delantero madrileño. Cada vez que el nueve no ha participado en un partido, Tenerife y Córdoba, los blanquivioletas no han conseguido la victoria (un empate y una derrota). Pero un dato que llama todavía más la atención es que el primer goleador en liga del equipo, quitando a Mata, es Míchel con cuatro goles, un jugador que ha pasado por el ostracismo durante varios meses, sin ir convocado durante varios partidos.

Y para acabar con los asuntos deportivos, sorprende su bipolaridad con futbolistas como el propio Míchel, Toni Villa, Nacho o Antoñito, hombres que estaban a un buen nivel y que de golpe y porrazo desaparecen de los onces titulares o, incluso, de las convocatorias. En el caso de Toni es más entendible por el nivel de Ontiveros, pero por ejemplo, en el lateral izquierdo ha preferido poner a Moyano a pierna cambiada que a Nacho quién tenía mucho apoyo por la parroquia vallisoletana dado su buen nivel de juego en las primeras jornadas.

Luis César Sampedro | Real Valladolid
Luis César Sampedro | Real Valladolid

En cuanto a la situación extradeportiva, todo explotó con la rueda de prensa previa al partido frente al Rayo Vallecano. Luis César dijo que no le sorprendía ya nada, estaba "curado de espanto desde noviembre". Y es que, según el de Vilagarcía de Arousa, la parte noble de la entidad blanquivioleta le ofreció una renovación de contrato hasta el año 2020, en ese mes.

Estas palabras provocaron el caos tanto en el aficionado como en el propio equipo ya que desde esa comparecencia, el equipo no muestra ambición ni está con la actitud de anteriores partidos. La directiva buscó sustituto para despedirle y que no se sentara en Alcorcón, pero entre la indemnización que habría que abonar a Sampedro y las exigencias de los candidatos al puesto, Luis César se ha mantenido como primer entrenador del Valladolid. Habrá que ver por cuánto tiempo.

Debe continuar (Adrián Gómez@Adrian_Gomez99)

Luis César Sampedro es uno de los entrenadores blanquivioletas más criticados en los últimos años. Estas críticas se deben a las carencias defensivas del equipo. Desde este punto de vista, es normal que se critique al entrenador porque el equipo ha encajado 44 goles esta temporada, pero en algunos aspectos se ha sido injusto con el míster gallego, porque la base de un equipo es la defensa, y la gente centra en eso todas sus críticas.

La defensa está dejando mucho que desear esta temporada, y en esto tiene parte de culpa el entrenador, pero también el director deportivo y presidente, que son los que fichan y tienen gran parte de responsabilidad en el bajo nivel defensivo del equipo, aunque también es verdad que no toda la defensa está mal, el problema está principalmente en los centrales.  

El equipo lleva escaso de centrales desde invierno, esto es un problema muy serio porque ahora mismo hay dos centrales disponibles para jugar en el equipo. Ante esto, Luis César Sampedro lo único que puede hacer es alinear a Calero y a Kiko Olivas, porque solo se le ocurre a la directiva traer a un central que lleva casi un año sin jugar y vender a Guitián a diez minutos del cierre de mercado, quedando al equipo con tres centrales.

"Luis César es uno de los culpables, pero no el principal"

Y claro, Luis César no puede hacer experimentos, colocando a Borja, Luismi o Moyano de centrales, porque como lo hagan mal se crucificará al entrenador, pero la realidad es que no tenía opción de poner a otro.

Otro aspecto de crítica es la alineación, con estilo más ofensivo o defensivo.  A principio de temporada el equipo empezó jugando con un 4-2-3-1, parece que las cosas funcionaban, el equipo jugaba bien y ganaba, pero el problema era que encajaban muchos goles. Lo importante es ganar, y el equipo en las diez primeras jornadas estaba dentro del playoff.

En resumen, ganas, marcas muchos goles, juegas bien y también es verdad que encajas más de lo debido, eso hay que corregirlo, pero no se puede criticar y culpar de todo al entrenador por perder dos partidos seguidos o porque te marquen muchos goles al principio de la competición.

Luis César, durante el encuentro contra el Barcelona B | LaLiga 1|2|3
Luis César, durante el encuentro contra el Barcelona B | LaLiga 1|2|3

El equipo estaba en playoff, jugaba bien, marcaba goles y el único problema es que te marcaban muchos goles, tienes treinta partidos para corregirlo.

Y ahora, que debido a las críticas ha cambiado su forma de jugar, con un sistema más defensivo, 4-3-3, el equipo no encaja apenas goles, pero tampoco consigue marcar, porque los delanteros están muy solos arriba, apenas les llegan balones, es mucho más difícil crear juego.

Hay que ponerse de acuerdo, no se puede criticar porque es muy ofensivo y después hacer lo mismo porque juega muy defensivo. Lo único claro es que Luis César quiere ganar, de ahí los cambios hacía un sistema más defensivo, para encajar menos y ganar por la mínima o empatar a cero.

El principal problema del equipo es no ganar fuera de casa, y en esto es en lo que se puede criticar al entrenador, equivocarse en algún cambio es secundario, y como es muy fácil echar las culpas al entrenador, pues todo para él, Luis César es uno de los culpables, pero no el principal.