Todo apuntaba a que el Atleti no se desgastaría demasiado en este partido: un 3-0 en casa los tenía ya con un pie en la siguiente ronda.

Pero Simeone no se conformó con eso. La gran mayoría firmaba un partido insípido en casa del Lokomotiv, en el que los rojiblancos no descargasen demasiado sus pilas para dejar así sus fuerzas reservadas para el Villarreal este fin de semana, pero el Cholo ha vuelto a demostrar que cada partido es importante dejando, ni más ni menos, que cinco goles en el país más grande del mundo de regalo. Lyon, cada vez más cerca.

El buen hacer jugó como uno más en el campo: el equipo disfrutó del partido, de cada instante, de cada minuto, puesto que se convirtió en el dueño y señor de un estadio al que acudía como visitante. Merecidísimo resultado y nueva lección del coach, al que nada se le puede recriminar por exceso de prudencia. Los cambios bien; la estrategia, aún mejor. Brillante actuación también del técnico argentino. 

Festival de goles

Correa inauguraba el marcador en el minuto 16 de partido, tras una buena coordinación con Koke. Lidió con un defensa, se quedó sólo en la frontal del área y sentenció con un disparo en diagonal pegado al palo izquierdo. Sin embargo, instantes después, los rusos recortarían distancias anotando el gol que quedaría como “el del honor”.

Fue Rybus el encargado de llevar a cabo la hazaña, disparando un balón desde fuera del área que Werner no vio llegar. Desde entonces, nada pudo hacer la cuadrilla de Siomin para evitar el bombardeo de goles que perforaron su meta.

Veteranos y jóvenes por igual acecharon la portería de los rusos: tras el argentino le llegó el turno a Saúl. Él se lo guisó, él se lo comió, puesto que fue el propio ilicitano quien inició la jugada en el centro del campo, se asoció correctamente con Filipe y chutó desde el punto de penalti.

Habiendo cumplido, Saúl abandonó el terreno de juego para dar paso a Griezmann, que encendió todavía más el fuego de los rojiblancos. Y es que ese juego ardiente era mucho en contraste con el frío de Rusia. El galo provocó un penalti que le cedió a Torres, y el “9” no perdonó desde los 11 metros.

Fernando repitió gol gracias a una buena jugada de Correa, que lo dejó sólo al borde del área: el fuenlabreño sólo tuvo que definir bien el esférico, y lo hizo hacia el lado derecho. 

Obra de arte definitiva

El último gol fue un verdadero espectáculo. Correa se lució como nunca, pues evitó al defensor con un sombrero digno de admiración, y Griezmann culminó la obra con una vaselina por la escuadra. Impecable ejecución de ambos. 

Por si este recital fuera poco, además, hay que tener en cuenta que el dominio de los pupilos de Simeone fue absoluto durante los 90 minutos. Las ocasiones no cesaban de producirse y todos participaron en este gran triunfo. Correa fue sin duda la pieza clave, reivindicándose de nuevo como uno de los mejores de lo que va de temporada. 

Colchoneros a luchar, colchoneros a morir

Con esto, el Atlético ha dejado muy claro que va a por todas, y que quiere estar en Lyon el próximo 16 de mayo. El espectáculo fue como un regalo por parte del equipo a su afición, puesto que aunque los octavos parecían ya sentenciados, los atléticos se dejaron la piel en el Lokomotiv Stadium. 

La mala noticia fue, no obstante, la lesión de Filipe, que no tiene buena pinta en absoluto. El brasileño recibió un duro traumatismo en la pierna izquierda que queda pendiente de evolución –se someterá a unas pruebas al llegar a la capital. Por su parte, Juanfran también se marchó sustituido, aunque en su caso fue una medida cautelar por causa de unas molestias musculares.  

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Sobre el autor
Marina Greciano
Estudiante de 2º de Bachillerato. No lo pueden entender. Madrid.