Volvió a salir ese "#EspíritoLoitador" del que tanto presume el Club Deportivo Lugo. Igual que frente al Granada, el equipo peleó hasta el final y logró el botín de los tres puntos. El acierto de Francisco con los cambios (dos de ellos –Mario Barco y Albarracín- goleadores) y unos jugadores que pelean por su camiseta hasta el final, dinamitaron las ilusiones de un Alcorcón que se había adelantado en el marcador. “El día de la marmota” en palabras de Julio Velázquez, frustrado por volver a ver cómo tras ponerse por delante en el marcador, sus jugadores fueron incapaces de ampliar la ventaja que les daba el gol anotado por Dorca en el minuto 26.

“Hemos tenido cuatro muy muy claras para ampliar la ventaja, no la amplías; partido abierto y ellos son capaces de darle la vuelta en dos situaciones puntuales”, declaró el entrenador salmantino refiriéndose al dominio de su equipo durante la primera hora del encuentro y a los goles de Barco y Albarracín en los minutos finales.

Pese a la incapacidad de los alfareros para cerrar el partido, Velázquez dijo que su equipo hizo un partido “bastante digno, tanto en la primera como en la segunda parte” y que “cuando quieres guardar el resultado en exceso, pasa lo que pasa”. No ocultó tampoco su idea de que los nervios por la posición que ocupan en la tabla clasificatoria les han pasado factura: “Somos humanos, cuenta mucho lo emocional. Te entran los miedos, quieres cuidar el resultado y al final la manera de cuidarlo no es defendiendo en tu área.  La manera de cuidarlo es intentar generar más, tener más poso, más temple, que se desarrolle más en campo rival que en campo propio… Al final cuando se desarrollan esos miedos dan paso a lo antagonista, a lo que tu prefieres”