En Gernika se han ganado el derecho a soñar. Su equipo, con uno de los presupuestos más humildes de la categoría, suma ya 51 puntos tras vencer al Lealtad y se postula como un serio candidato para disputar la promoción de ascenso. Trabajo, trabajo y más trabajo del bloque de Jabi Luaces, que lleva toda la campaña en la zona alta. Ya no es casualidad. El cuadro de la Ciudad de la Paz gana con frecuencia y además juega bien al fútbol. Con intensidad y presión como señas de identidad, los blanquinegros son un conjunto sólido, al que es muy complicado hacerle goles. Mucho más en Urbieta, donde no recibe un tanto desde el 20 de enero.

Once inicial del Gernika Club (fuente SD Gernika)
Once inicial del Gernika Club (fuente SD Gernika)

Por el contrario, el Lealtad continúa siendo un constante quiero y no puedo. El cuadro asturiano suma un nuevo tropiezo, se queda decimoctavo con 23 y no termina de sacar la cabeza de un pozo que cada vez tiene menos luz. El calendario no perdona y solamente restan ya 24 puntos en juego. Son seis tantos los que tienen que remontar los leales si quieren estar otra temporada más en Segunda División B. Solamente tres victorias de los últimos 21 partidos y una incapacidad manifiesta para encontrar la meta rival. Una losa demasiado pesada para una entidad que quiera lograr la permanencia. Hoy al menos dieron la cara, sobre todo en el segundo tiempo. 

Tanto que hizo justicia

El encuentro arrancó eléctrico en Urbieta. El Gernika quiso apretar desde los primeros minutos, forzando un saque de esquina y acciones peligrosas. Santamaría cayó derribado dentro del área, empujado por Mauricio Torres. Pena máxima para los de Busturialdea. Abaroa la mandó a las nubes, desaprovechando una gran oportunidad para adelantarse. El Lealtad, por su parte, siguió con una actitud valiente, con las líneas adelantadas e intención de plantar cara. Sin embargo, los locales se encontraban bastante mejor y la defensa visitante daba muestras de debilidad. En un rechazo procedente de un córner, Güemes disparó con potencia, pero rebotó en un zaguero. Urbieta pidió aquí otro penalti por posible mano, pero Germán Cid Camacho no lo estipuló así.

Un jugador celeste intenta avanzar ante la defensa del Gernika (fuente CD Lealtad)
Un jugador celeste intenta avanzar ante la defensa del Gernika (fuente CD Lealtad)

Cada envío hacía sufrir a los centrales visitantes, Santamaría, Abaroa y Güemes combinaban a la perfección. Los de Luaces estaban superando con creces a los maliayos y el tanto parecía cuestión de tiempo. Los forales seguían imprimiendo ritmo al duelo, tratando de descolocar a los de Asturias. Abaroa remató a bocajarro y paró Tejero. El rechazo le cayó a Santamaría, que la mandó al larguero. El acoso sobre la meta asturiana seguía siendo brutal. En una acción dentro del área, un empujón fue considerado por el trencilla como penalti. Esta vez sí, Santamaría alojó el cuero a la izquierda de Tejero, inaugurando el marcador y encendiendo a su parroquia.

El 1-0 se antojaba bastante corto para lo visto en Urbieta. El Gernika combinaba con facilidad, triangulando, orientando hacia los costados y volviendo loca a la defensa celeste. La tormenta local continuaba y en una preciosa acción colectiva, Santamaría encaró al arquero, pero su intento se fue algo desviado. Los laterales locales, Ekaitz Jiménez y Kevin Calle, penetraban fácilmente en la frágil defensa visitante. Tuvieron que pasar muchos minutos para que los de Roberto Aguirre pudieran respirar, teniendo dos opciones en sendos saques de esquina. Un cabezazo de Moreno, y sobre todo, un disparo de Mendi desde fuera del área que por el efecto óptico, muchos consideraron como gol. No llegaron las tablas pero sí el intervalo.

Los jugadores locales celebran el gol (fuente SD Gernika)
Los jugadores locales celebran el gol (fuente SD Gernika)

Mejora insuficiente de los visitantes 

Aguirre trató de reaccionar en el descanso, buscando más mordiente ofensiva, metiendo a Eduardo Paya. El líquido elemento se iba a erigir en protagonista. La entrada del “14” iba a dotar de algo de dinamismo al flanco derecho del Lealtad. Precisamente, el recién entrado tuvo la oportunidad de empatar, al lanzar un centro-chut que exigió a Diego Carrio una buena intervención. No se rendían los del Principado. Mendi lanzó un zurdazo de volea desde la media luna, que volvió a hacer intervenir al guardameta local. Eran los mejores minutos de los de Villaviciosa, que veían cerca las tablas. Sin embargo, poco a poco, el Gernika consiguió plasmar su mejor estado físico y anímico. Además, Omar vio su segunda amarilla y dejó a su equipo con diez.

Casi inmediatamente después, Olaetxea pudo poner el segundo con un latigazo que se estrelló en el larguero. La madera quería ser protagonista. Rober encaró a la zaga gernikarra y disparó desde un costado, encontrando nuevamente el travesaño. Conforme pasaban los minutos, era mayor la presencia del Gernika en campo rival. Ekaitz Jiménez, muy participativo, buscó desbordar constantemente por su perfil. Pese a su inferioridad numérica, no quería rendirse el Lealtad, consciente de su difícil situación clasificatoria. El Vitoria, venciendo en Merkatondoa, había puesto patas arriba la zona baja de la clasificación, dejando a los asturianos seis por debajo de la permanencia y el playout. Era vital para los negrillos al menos sacar un punto. Su entrenador buscó soluciones en el banquillo, metiendo a Iván Garrido.

Duelo áereo, al fondo Urdaibai (fuente CD Lealtad)
Duelo áereo, al fondo Urdaibai (fuente CD Lealtad)

El pitido final se iba acercando. Larruzea lo iba a probar desde la frontal, mandando el esférico cerca de la cepa del poste. El tiro exterior fue un recurso muy repetido por los vizcaínos en el encuentro. Luaces decidió refrescar a su plantilla, metiendo en el campo a Otiñano y a Pradera. Éste último podía ser una buena baza al contragolpe. La solidez defensiva permitió al Gernika afrontar los últimos minutos sin sufrir en exceso. Pudo llegar el segundo. Un centro del cuadro txuribelz fue rematado por un blanquinegro y rechazado por un zaguero. En la continuación, Ekaitz Jiménez disparó cruzado y algo desviado. Aún le dio tiempo a Pradera de intentarlo, ya sobre la bocina, disparando desde el interior del área, pero Tejero mandó a córner.

Próxima jornada

El Lealtad mostró buenas maneras, pero sin acabar de materializar. No tienen gol los guajes y eso se está notando en la temporada. Se enfrentarán en la próxima jornada al Mirandés en Les Caleyes, en otra auténtica final, apurando una de sus últimas opciones para conseguir la permanencia. Todo lo contrario para los de Urdaibai. 11 de los últimos 15 posibles y tres encuentros consecutivos sin recibir gol. Viajarán el próximo fin de semana hacia tierras navarras, para medirse a Osasuna B en el siempre complicado Tajonar (sábado 16:30h).

Puntuaciones VAVEL

Santamaría 3
Abaroa 2
Ekaitz Jiménez 1