El Lorca sigue sin dar con la tecla y volvieron a dejar escapar dos puntos en la visita del Barça B al Francisco Artés Carrasco. Los aficionados comienzan a desesperarse y eso se refleja en la grada. Poco queda ya de esa afición ilusionada con ganas de volver a ver fútbol profesional por primera vez en la ciudad en once años. En un municipio donde el fútbol local no atrae tanto a las personas como en otro locales, el club de Xu Genbao había devuelto las ganas de ir todos los fines de semana al estadio para ver en Lorca a los mejores clubes posibles. De eso poco queda ya, y los números en el último partido reflejan la realidad de lo que está ocurriendo a este club. Frente al Barça B, el número total de asistentes fue de 3.742 espectadores, la cifra más baja registrada este curso.

No ha sido posible volver a enganchar a la afición. A pesar de los buenos resultados frente al Sporting de Gijón y Cádiz, esa derrota frente al Albacete Balompié bajo la lluvia en la localidad murciana, ha hecho a todos ver la realidad y pensar que la permanencia es una tarea casi imposible. Los jugadores no se sienten precisamente arropados por los aficionados y en varias ocasiones se ha visto a los protagonistas hacer llamamientos para que los habitantes de la ciudad acudieran al estadio para disfrutar de buen fútbol. La respuesta no está siendo la esperada aunque la más razonable ante la situación que ha vivido el club desde que entró el 2018.

Ahora les toca preparar un partido muy importante frente a un Tenerife que busca entrar en puestos de ascenso. Los canarios no consiguieron ganar en su visita al Artés Carrasco. El Lorca FC es el peor visitante de la categoría y tendrán que luchar para conseguir un buen resultado frente a un rival de esta magnitud.