Este martes por la tarde saltó la noticia de que Diego Pablo Simeone y Paulo Dybala habrían cenado juntos en un restaurante de Madrid. Al parecer, el jugador de la Juventus pasó este lunes por Madrid, aprovechando el parón de selecciones y al no estar convocado por Sampaoli, en un viaje que ha despertado todo tipo de sospechas sobre un futuro del jugador de la Juventus en la capital de España.

La selección argentina juega un amistoso contra España el próximo 27 de marzo y se espera que Dybala acuda como espectador. Las primeras hipótesis apuntaban al Real Madrid, después, en exclusiva, Radio Marca desveló, en un primer momento, que se había reunido durante una hora con el entrenador del Atlético en el Restaurante Kabuki Wellington situado en la céntrica calle de Velázquez, en pleno barrio de Goya/Retiro. Más tarde la cadena COPE, desmintió la noticia y aseguraba que ambos habían coincidido en el mismo restaurante en Madrid, pero que no compartieron la misma mesa. Simeone cenó con su familia y Dybala con dos amigos.

A raíz de este encuentro, las especulaciones de por qué se ha producido no se han hecho esperar.  El futuro de Griezmann aún no está decidido y, aunque el Atlético está poniendo toda la carne en el asador para que el francés no deje el club, lo más probable es su salida. Si eso sucediese, el club rojiblanco ingresaría 100 millones de euros,  que es la cláusula de rescisión de Antoine, y podría aprovecharlos para hacerse con el jugador argentino. Además, su fichaje despertaría la ilusión de toda la afición colchonera. De hecho, el técnico no le reconoció y fue  el jugador de la Juventus quien se acercó al entrenador del Atlético para saludarle.

Furor en Europa

Dybala, ‘la joya’ de la Juventus, con solo 24 años, lleva dos campañas siendo la sensación de Europa gracias a sus estadísticas. Cuando cruzó el charco y desembarcó en Europa, concretamente en la Juventus, en el curso 2015/2016, sumó 20 goles en 41 partidos con un promedio de 0,49. Se podría decir que en una mitad marcó y en otra no. En ese enero de 2016 ya logró 12 goles en 20 partidos. En su siguiente año rebajó su cifra a 15 en 42 duelos con una media de 0,36. Un balance bastante aceptable para un recién llegado a una liga conocida como muy defensiva.

Está llamado a ser una de las estrellas del fútbol europeo. Aún no ha explotado del todo pero sí está dando señas de su increíble magestría futbolística. Algunos le han llegado a denominar como el nuevo Messi, dado que comparten posición y nacionalidad. Pero todavía le queda mucho para llegar a ese escalón.

Similitud con Griezmann

Antoine Griezmann es la estrella del Atlético de Madrid y su suministrador de goles. Si dejase el club, ese papel quedaría huérfano, si bien quedaría Diego Costa, y habría que buscar un sustituto con las mismas características. En este curso lleva 17 goles en Liga con una media de 0,65 tantos por partido. El que, en las últimas horas, ha sido el candidato para sustituirle, lleva 11 goles a favor con una media de 0,92 por encuentro.  En Champions, el argentino solo ha anotado una diana mientras que el francés ha visto portería en dos ocasiones. Para situarlo mejor, Griezmann ha marcado esos goles en 32 partidos y Dybala  ha tenido minutos en 19 choques.  Datos con gran similitud entre los dos y que demuestran el olfato goleador que poseen.  

Habilidad con la zurda

Por si fuera poco, tienen más parecidos. El ‘principito’ de Simeone juega como extremos o delantero y se caracteriza por su rapidez, habilidad en el regate y un dominio de la pierna izquierda. Mismas cualidades que la perla albiceleste que juega como delantero aunque puede desempeñarse como media punta. También tiene una gran habilidad con su pierna izquierda, y maneja muy bien su pierna derecha. Es muy rápido en el desmarque, y difícil de controlar en el duelo uno contra uno. Su regate es lo que más descoloca a los defensores de la serie A.

Dybala se formó como futbolista en Instituto de Córdoba, donde jug en primera división solo la temporada 2011-2012, cuando fue transferido al Palermo de Italia. En junio de 2015 fue adquirido por Juventus en 32 millones de euros convirtiéndose en el octavo argentino más caro de la historia.

El Barcelona y el Real Madrid entre otros grandes se lanzaron a intentar su contratación cuando despuntó en Italia, aunque la Juventus le mejoró el contrato para intentar retenerlo.

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