Raúl Gonazalez Blanco ha dado el paso definitivo para convertirse en entrenador de fútbol. El antiguo delantero del Real Madrid ha decidido que su futuro profesional está en los banquillos, obtendrá el título en el curso élite que organiza la Federación Española de Fútbol el próximo mes de abril, al cual tienen derecho exclusivo aquellos jugadores que hayan sido internacionales o hayan jugado durante diez años en Primera División.

El que fuera capitán blanco se hará cargo del Juvenil B del Real Madrid cuando obtenga su título. Este volvió el pasado junio a formar parte del Real Madrid después de abandonar su cargo en La Liga. Aún no había encontrado un puesto para ocupar en el que se sintiera a gusto desempeñando las tareas, por lo que se ha decidido que sea el técnico del Juvenil B de la cantera blanca.

El Juvenil B estaba dirigido hasta ahora por Álvaro Benito, otro exmadridista que pasará a hacerse cargo del Juvenil A. Con la posible salida de Solari del Castilla a final de temporada, todo hace suponer que será Guti quien ocupe dicha vacante y se encargue de dirigir al equipo B del Real Madrid la próxima temporada.

Raúl abandonó el Real Madrid en el año 2010, coincidiendo con la llegada de José Mourinho. Desde entonces, el delantero ha militado el el Schalcke 04, donde se le recuerda con un gran cariño por el servicio prestado, en el Al-Sadd de Qatar y en el New York Cosmos, donde puso fin a su carrera profesional y desde donde realizó trabajos para La Liga como representante de la misma en tierras americanas.

Desde que el español se retiró, muchos aficionados pedían la vuelta del mismo al Real Madrid, donde es considerado una leyenda del club. Jugó 550 partidos con la camiseta blanca, anotó 228 goles y dio 85 pases de gol. Además, conquistó seis ligas españolas, cuatro Supercopas de España, tres Champions League, dos Copas Intercontinentales y una Supercopa de Europa.

Raúl fue el capitán del Real Madrid durante muchos años y dejó recuerdos imborrables en la memoria de los aficionados madridistas que van más allá de los títulos, como cuando silenció al Camp Nou o los goles anotados en las finales de la Ocatava y Novena UEFA Champions League del equipo blanco.