El Olympique de Lyon recibía a las pupilas de Fran Sánchez en el Groupama Stadium. Las vigentes campeonas de la competición afrontaban, al igual que las azulgranas, un choque inédito, puesto que nunca antes se habían visto las caras en competición europea. Ilusión contra experiencia. 

El proyecto consolidado de las francesas, que sabía lo que es ganar la Women’s Champions League, tenía por delante una eliminatoria contra un novato en la competición que no se quedará de brazos cruzados e irá a por todas en el Miniestadi de cara a imperar en el Valeriy Lobanovskyi Dynamo Stadium el próximo 24 de mayo.

El Parc Olympique Lyonnais se tildaba de emoción para retomar el camino europeo. Las francesas, con Marozsán y Hegerberg comandando la máquina ofensiva francesa, salían al Groupama Stadium con la mente en revalidar el título y superar una eliminatoria que complicada, tuvo sus más y sus menos para ambos equipos.

Con la inexperiencia de frente, las francesas venían de superar dos eliminatorias con cierta facilidad y al igual que el conjunto azulgrana, con un resultado global inmerso en una goleada conseguida contra sus respectivos rivales en la fase de los octavos de final. 

En tierras francófonas se vivió un duelo de alto voltaje entre el Olympique de Lyon y el Fútbol Club Barcelona, que lucharon hasta el pitido final por un mismo objetivo con armas distintas.

Se adelantaron las vigentes campeonas

Ante una Sandra Paños providencial para el conjunto azulgrana, las francesas se adelantaban en el último tramo de la primera parte del encuentro con un gol de Marozsán después de una muy buena conducción de Bronze por el centro, que llegando al área frontal, le daba una asistencia providencial a la banda para que la jugadora con el dorsal 10 disparara con el exterior del pie derecho, encajando el balón por toda la escuadra.

En un duelo en el que la posesión se tildó de intermitencia pasando por ambos equipos, la efectividad de cara al gol por parte de las azulgranas fue frenada por la solidez en defensa de las francesas, que con Bouhaddi bajo palos comenzó a notar el peligro ofensivo de la medular blaugrana cuando Martens entraba en acción en el centro del campo.

Duggan, peligro ofensivo

Las oportunidades de peligro para Bouhaddi se confirmaron con una bonita triangulación entre Vicky y Fabiana, que acababa en los pies de la Duggan para hacer el 1-1 en el marcador

Con mayores ocasiones de peligro en la segunda parte, las azulgranas reaccionaron después de hacer el empate en el marcador y a partir del minuto 71. Era en ese momento cuando el conjunto azulgrana apostaba por seguir soñando con remontar una eliminatoria que con un resultado en contra, pero con muy poca ventaja para el conjunto francés, tendrán opciones de remontar en el Miniestadi.

El 1-1 en el marcador llegó con un testarazo providencial de Patri Guijarro, que remataba a bocajarro después de un córner cerrado efectuado por Andonova.

Fue en el minuto 71 cuando las expectativas de las azulgranas se tildaban de emoción y cuando las pupilas de Fran Sánchez comenzaron a luchar por mantener el resultado, cambiando la dinámica de su juego.

Pero la consistencia en la defensa no fue suficiente. Las francesas no paraban de efectuar buenas recuperaciones y poco a poco, se fueron acercando a la portería de Sandra Paños, a quien batieron por segunda vez y con un remate cruzado firmado por Hegerberg después de un pase de Shanice van de Sanden lejos del alcance de la guardameta valenciana, que lamentaba el factor sorpresa que había vuelto a adelantar a las de Reynald Pedros.

Batidas, pero no muertas

Las azulgranas despegarán de tierras francófonas con un buen resultado en el marcador de la eliminatoria. Con vistas al resultado global, las pupilas de Fran Sánchez tendrán que pulir detalles para recibir a las francesas en el Miniestadi y aprovechándose del factor cancha, tendrán que conseguir el billete para estar en las semifinales con sus propias armas.

El reto es mayúsculo y eliminar al vigente campeón no es tarea fácil, pero la perseverancia siempre es premiada con la regularidad de por medio. Las azulgranas tendrán que tirar de unión para superar el gran obstáculo llamado Olympique de Lyon.