Éste jueves por la mañana Celta y Coruxo disputaron un partido de entrenamiento en el Estadio de Balaídos, aprovechando el parón liguero, aunque el Coruxo jugará éste domingo su partido de liga de la Segunda División B. Con la ausencia de los internacionales, Unzué ha tenido la ocasión de ver en acción a los menos habituales y a algunos canteranos que participaron en el encuentro.

Pocos datos sabemos del partido amistoso dado que se jugó a puerta cerrada pero tiene toda la pinta de que el Celta dominó de principio a fin ya que vencieron los célticos por cinco goles a cero con tantos de Víctor Pastrana, Facundo Roncaglia, Paul Roigé y Lucas Boyé, que marcó dos goles.

En el cuadro vigués participaron los jugadores del primer equipo Sergio, Hugo Mallo, Andreu Fontás, Sergi Gómez, Jonny, Gustavo Cabral, Facundo Roncaglia, Emre Mor, Radoja, Jozabez y Lucas Boyé. Los canteranos que complementaron al grupo fueron Brais Méndez, Aarón Rey, Dani Molina, Víctor Pastrana y Paul Roigé. Los ausentes han sido los internacionales Iago Aspas, Maxi Gómez, Pione Sisto, Pablo Hernández, Lobotka y Robert Mazán. Además Daniel Wass y Rubén Blanco siguen lesionados, aunque se espera que ambos puedan estar recuperados para el siguiente partido de liga ante el Athletic en San Mamés. Mientras, Emre Mor recibió el alta tras su proceso gripal que le impidió viajar con su país como internacional y disputar el partido de liga contra el Málaga la pasada jornada.

El choque valió para que Unzué pudiera ver las cualidades de los canteranos olívicos, para que los menos habituales del primer equipo tuvieran la oportunidad de sorprender al míster y para no perder la dinámica de partidos. Tras éste encuentro el entrenador ha dado tres días libres a la plantilla, por lo que no volverán a entrenar hasta el próximo lunes.